“Café de chinos”, un relato de fracasos delirantes

Por Óscar Reyes

Harry, un hombre de 46 años interpretado por Bruno Bichir, y su viejo amigo Jake  de 50 que cobra vida gracias a Odiseo Bichir, se enfrascan en una discusión que muestra sus debili­dades humanas y sus sueños rotos como artistas.

Ambos personajes se sitúan en Nueva York, ciudad que es reflejo de la decadencia humana y la falta de oportunidades económicas de los protagonistas.

Dirigida por Alejandro Bichir, “Café de chinos” es la adaptación de la obra de Ira Lewis que iniciará sus funciones a partir del próximo 4 de septiembre; se presentará todos los lunes a las 8:45 de la noche.

En conferencia de prensa, los actores mostraron su emoción por participar en esta puesta en esce­na que los tiene cautivados.

“Cuando conocimos la obra, y luego la leímos nos dimos cuenta que es el tipo de teatro que toda nuestra vida nos ha gusta­do hacer. De alguna manera somos suficientemente cercanos a los personajes. Consideramos que nos la habían escrito a nosotros”, sostuvo Bruno Bichir.

Respecto a su labor en los escenarios, Odiseo afir­mó que el teatro le ha ayudado en muchos aspectos de su vida:

“El teatro me ofreció esa oportunidad de sentirme cómodo en las multitudes”.

Diálogo delirante

Durante 90 minutos, Harry, un escritor fracasado, incre­pa a Jake sobre una deuda que tiene con él, pero la dis­cusión va más allá, ya que la frustración de los dos rompe con la amistad que tenían desde hace 12 años.

En “Café de chinos”, el público podrá encontrar la acidez como el principal ingrediente. Además de que pondrá en tela de juicio los bajos instintos, de dos per­sonajes que se consideraban amigos, como la envidia, los celos y la amargura.