EAST RUTHERFORD.- Dallas Cowboys termina temporada con una dramática victoria 36-35 sobre New York Giants, para llegar a playoffs con un impulso anímico, en un juego en el que le dio descanso a Ezekiel Elliot, su mejor jugador.
Los neoyorquinos eran favoritos para las casas de apuestas, porque los texanos ya eran campeones divisionales y el resultado no modificaba su posición en la postemporada, por lo que el coach Jason Garret no utilizó a algunos de los titulares.
El que sí jugó fue el quarterback Dak Prescott, quien fue la figura a lanzar un pase de anotación de 32 yardas para Cole Beasley, para después guiar la conversión de dos puntos con un pase para Michael Gallup, en una decisión valiente para darle la vuelta al marcador y dejar las cosas 36-35.
La jugada del touchdown que acercó a Cowboys se había marcado como pase incompleto, pero en la revisión, se cambió la decisión, debido a que Beasley hizo contacto con su rodilla dentro del terreno de juego.
Prescott redondeó una tarde con cuatro touchdowns y 387 yardas por pase, sus mejores números de la temporada, y en los tres iniciales se combinó con el ala cerrada, Blake Jarwin, un novato que en un partido logró una marca que no logró hacer Jason Witten en toda su carrera.
A pesar de que no se jugaba nada, el partido fue un agarrón, Dallas se puso en ventaja 14-0, pero New York reaccionó, porque era un día especial para a franquicia, ya que podía ser la despedida del mariscal de campo Eli Manning, quien apunta a cambiar de aire para la próxima temporada.
A pesar de la gran atrapada de Cole Beasley para la victoria vaquera, la jugada del partido fue de Saquon Barkley, quien con un brinco enorme se apuntó un touchdown con el que Giants estuvo cerca de cerrar la temporada con un triunfo y de paso impuso un récord al ser el novato con más anotaciones en la historia de la franquicia, al llegar a 11, una más que las logradas por Bill Paschal en 1943.
El corredor, quien fuera la primera selección de los neoyorquinos, llegó a dos mil yardas en la temporada, para afianzarse como el referente ofensivo de los Giants para los años venideros.
Con su séptima victoria en los últimos ocho duelos, Dallas Cowboys está listo para ser local en el Juego de Comodín, donde todo apunta a que recibirá a Seattle Seahawks el próximo fin de semana.
JLR
