Grupo D: Francia buscará el bicampeonato en Qatar 2022 con serias bajas

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Madrid.- Con Karim Benzema y Kylian Mbappé como principales estandartes, los "bleus" tienen que recuperar la base ganadora que les permitió alzarse con el título en 2018 y reafirmar su potencial con la victoria en la Liga de las Naciones de 2021. El seleccionador busca un nuevo esquema que dé solidez al equipo y permita la expresión más contundente del potencial ofensivo del que dispone.

El objetivo es claro, revalidar el título mundial, algo que solo dos selecciones han logrado en el pasado, Italia en 1938 y Brasil en 1962, lo que pone de manifiesto la dificultad de la tarea.

La propia Francia comprobó en sus propias carnes en 2002, cuando llegaban con el título logrado en su país y refrendado dos años más tarde con la Eurocopa de Bélgica y Holanda. Pero en Corea del Sur fueron incapaces de superar la fase de grupos, una maldición que ha sucedido también a los tres últimos campeones. La ventaja de Francia es que, a diferencia de Italia en 2006, España en 2010 y Alemania en 2014, ganó el Mundial con una selección bastante joven y con recorrido por delante.

En la Eurocopa pagaron algo la falta de experiencia y cayeron en la tanda de penaltis contra Suiza en octavos de final, lo que hizo encender las alarmas. Deschamps se dio cuenta de que debía reinventar la receta que le llevó a ganar el Mundial y hacer hueco a las estrellas.

El principal quebradero de cabeza está para el técnico en dar cabida en el ataque a dos estrellas de la talla de Mbappé y Benzema. El retorno del segundo a la selección, tras más de tres años de ausencia por su imputación en un caso de chantaje, genera nuevas oportunidades, pero obliga a reescribir el dibujo.

Deschamps quiere poner en marcha un equipo en el que, por delante del portero Hugo Lloris, se sitúen tres defensas y dos carrileros, unos cimientos en los que sustentar su poderío ofensivo. Raphael Varane, Jules Koundé y Lucas Hernandez son los principales candidatos a ocupar el puesto en la defensa, mientras que Theo Hernandez y Kingley Koman tienen el máximo de papeletas para asegurar los carriles.

Eso obliga a reforzar el centro del campo, lesionado Ngolo Kanté y Paul Pogba, ausencias que compensarán Aurélien Tchouaméni, Eduardo Camavinga o Adrien Rabiot, mientras que Antoine Griezmann se ocupa de la labor creadora. El jugador del Atlético de Madrid sigue siendo una pieza clave en el esquema de Deschamps, que regularmente alaba su liderazgo en el terreno de juego y en el vestuario. En Rusia fue el hombre que articuló el juego de Francia y pese a que su trayectoria ha sido algo irregular desde entonces, en Francia sigue manteniendo galones.

El ataque está en manos de dos jugadores en plena forma, Mbappé y Benzema, para muchos los máximos candidatos para alzarse con el Balón de Oro. La química entre ellos no ha sido por ahora espectacular, pero son una amenaza permanente para los rivales y la principal arma con la que Francia afronta la conquista de su tercera estrella.

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