CULIACÁN.- La llegada de Diego Armando Maradona a Sinaloa causó un impacto mundial, desde el anuncio, después con la presentación, los entrenamientos durante la semana, hasta el día del partido, en el que sus Dorados jugaron con la motivación de tener en el banquillo al más grande futbolista de la historia y de la mano de D10S lograron su primer triunfo del torneo, con una goleada 4-1 sobre Cafetaleros.
La sensación era el ‘Pibe de Oro’, la expectativa estaba más en la banca que en la cancha, incluso la televisora ESPN lo siguió con un recuadro todo el partido, algo que sin duda se agradeció desde Argentina, donde sin hubo más televidentes que en México.
En la cancha estaban dos de los peores equipos de la Liga de Ascenso que, además, pertenecen al mismo dueño, lo que da lugar a las suspicacias, en especial porque lo que parecía un empate a cero, terminó en un marcador abultado, con algunos errores que infantiles de la defensa y del guardameta de Tapachula.
“Desde Buenos Aires vengo, dicen que me crié en el barrio, y dicen que soy el pibe, un pibe pero con suerte, porque si me salta un gallo, no me le rajo en la cancha… Ay ay ay, mamá por D10S”, bien podría adaptarse el inicio del ‘El Sinaloense’ para continuar con la fiesta que provocó Maradona en Culiacán.
No se sabe cuánto tiempo le durará la inspiración a los jugadores de Dorados, pero por lo pronto, en el primer duelo les alcanzó para de nadar en el mar de la mediocridad, para salir del agua y volar en la cancha del Estadio Banorte.
Los futbolistas del ‘Gran Pez’ reconocen que el sólo hecho de saber que ‘El Pelusa’ es su director técnico los motiva a dar el extra en la cancha y ante Cafetaleros les alcanzó para ganar, en especial Vinicio Angulo, el jugador que porta con orgullo el 10 del equipo, que se apuntó un triplete que nunca olvidará.
La banda sinaloense no podía faltar para darle un ambiente festivo a la tribuna, mientras que en la cancha el ánimo se encendió con el primer gol del partido, en una buena jugada por el sector izquierdo que culminó Vinicio Angulo, justo cuando estaba por cumplirse la hora de juego.
Dos minutos después, la zaga le regaló un balón a Angulo, que aprovechó la cortesía para vencer al portero Carlos López, pero qué más daba, Diego estaba feliz y eso contagiaba al resto de los espectadores, los del estadio y los de la televisión.
Cafetaleros reaccionó con una jugada a balón parado en la que el defensa argentino Sebastián Ibars remató de cabeza para acercar a los chiapanecos, lo que provocó la molestia de Maradona y el regaño a sus jugadores.
El árbitro marcó un penal dudoso por una supuesta falta sobre José García, que cobró el ecuatoriano Vinicio Angulo para apuntarse su ‘hat-trick’ en una noche mágica en lo individual y especial para Dorados y sus aficionados; no todos los días debuta ‘D10S’ como entrenador de tu equipo.
La goleada tomó forma en la recta final con una cortesía del portero Carlos López, quien se ‘comió’ un disparo de larga distancia de Jesús Escoboza, para el 4-1 definitivo, que Maradona celebró al ritmo de la tambora, porque era una noche de fiesta y de los errores, el astro argentino es el menos culpable, de lo que sí tiene culpa es de inspirar a sus Dorados, que dieron el primer paso, pero los retos serán mayores en los próximos partidos.
JLR
