NFL ordena nueva era de césped: adiós a los campos más criticados
Redacción.- La NFL puso un ultimátum a sus franquicias: para la temporada 2028, los 32 equipos deberán jugar exclusivamente en campos certificados bajo nuevos estándares de seguridad. El objetivo es claro y urgente: reducir el alto número de lesiones que cada año golpea a la liga y que, según jugadores y especialistas, está directamente relacionado con la calidad del césped.
“Un gran paso”, afirma la liga
Nick Pappas, director de campo de la NFL, destacó que la medida es parte de un proceso de modernización que la liga considera indispensable.
“Queremos asegurarnos de apoyar a nuestros equipos y atletas para que cada campo cumpla con los requisitos que creemos son los correctos y en constante evolución”.
La regulación aplicará para estadios con césped natural, híbrido o sintético, siempre y cuando formen parte de un catálogo aprobado por las tecnologías BEST y STRIKE, herramientas que evalúan tracción, firmeza y comportamiento del terreno ante movimientos explosivos.
Una liga dividida por sus superficies
Actualmente, la NFL opera bajo tres realidades:
- 17 equipos juegan en 15 estadios con césped artificial.
- 13 equipos lo hacen sobre césped natural.
- 2 equipos utilizan superficie híbrida.
Entre los recintos más cuestionados está el MetLife Stadium, sede de Giants y Jets, señalado desde 2020 por ser escenario de múltiples lesiones graves. Desde su instalación de césped artificial hace cuatro años, 16 jugadores han salido lesionados, incluido el caso más mediático: Aaron Rodgers, quien se rompió el tendón de Aquiles en su debut con los Jets en 2023.
En esa misma campaña también sufrieron lesiones similares Jaelan Phillips (Dolphins) y Al Woods (Jets). Este año, el debate volvió a encenderse tras la torcedura de rodilla de Josh Jacobs (Packers, semana 11) y la rotura de ligamento cruzado anterior de Malik Nabers (Giants).
La presión de los jugadores dio resultado
La Asociación de Jugadores de la NFL (NFLPA) celebró el anuncio, resaltando que el gremio lleva años pidiendo campos más seguros, sin importar si son naturales o sintéticos.
“Aunque nuestros jugadores prefieren el césped natural, nos alienta que sus demandas estén dando un paso en la dirección correcta”.
El organismo reiteró su compromiso por mantener la colaboración con la liga para garantizar que las futuras generaciones de jugadores compitan en superficies más confiables.
Un giro decisivo rumbo al 2028
Aunque los equipos aún podrán elegir qué tipo de superficie instalar, deberán hacerlo únicamente dentro de la lista de sistemas aprobados, lo que limita el uso de materiales antiguos o modelos de césped sintético que han generado controversia.
La nueva política marca un antes y un después para una NFL que, presionada por lesiones de alto perfil, responde con una estrategia basada en ciencia, tecnología y un enfoque prioritario en la salud de sus atletas.