Alumnos y catedráticos de diferentes Facultades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), manifestaron que es urgente que el rector de la máxima casa de estudios, Enrique Graue Wiechers, “se olvide de cuidar únicamente la imagen de la institución educativa” y, por el contrario, ataque la verdadera “crisis” de inseguridad, pues actualmente comparten las aulas con “vagabundos, drogadictos, asaltantes, acosadores sexuales y asesinos”, indicaron algunos alumnos a Diario de México.
“Queremos que se castiguen a los responsables de todo tipo de delitos que se llevan a cabo en Ciudad Universitaria. Se supone que esta universidad ha sido concebida para las generaciones del futuro, pero hoy, también es hogar de malvivientes y vendedores de estupefacientes; nos preguntamos si así es como quieren formar a los futuros líderes”, expresaron.
Rodolfo Bautista, alumno en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, dijo que es necesario mejorar los protocolos de seguridad, debido a que fueron mal planteados. “No podemos negar que hay consumo de estupefacientes, acoso sexual y asaltos al interior de la universidad”, aseguró.
María Alejandra, estudiante que fue acosada en CU, recordó que fueron dos hombres quienes la comenzaron a molestar, “primero me hicieron señas, luego me dijeron palabras sexuales, afortunadamente era de día y pude salir corriendo e irme a un lugar con más gente. Yo denuncie este hecho a las autoridades universitarias, pero me dijeron que no pasaba nada y que otra cosa hubiera sido si me hubieran tocado o violado. Es claro que inhiben la denuncia, los jurídicos de las facultades ocultan lo que sucede siempre tratando de cuidar la imagen”.
Mediante un recorrido hecho por Diario de México se observó la presencia de gente en situación de calle caminando por los pasillos de las facultades y buscando comida en los botes de basura. También habían personas que inhalaban solventes cerca de las canchas. Además, el comercio informal abunda en la zona, los vendedores ofrecen cigarros en cajas de zapatos.
Debido al reciente asesinato de Lesby Osorio, quien fue localizada cerca de la Facultad de Ingeniería, la rectoría emitió 10 medidas de seguridad para implementar.
Entre ellos está mantener vigilancia permanente en las inmediaciones y accesos a las instalaciones por elementos de seguridad pública, extender y reforzar la iluminación en distintas zonas del campus, ampliar el número de cámaras de seguridad e instalar nuevas y modernas bases de vigilancia.
También instalarán más botones de emergencia, inhibirán el ingreso de taxis sin pasaje, mejorarán la seguridad en el transporte dentro del campus e incrementarán el patrullaje durante la noche mientras continúan con el combate de la venta de droga dentro de las instalaciones.
Al respecto, catedráticos como María de la Cruz Arriaga, de la Facultad de Economía, cuestionó las medidas, pues aseguró que “el problema no es poner más policías o militarizar, sino acabar con los atracos que hace el gobierno, castigar a los responsables y generar más empleos”.
En cuanto a las acciones implementadas recientemente, la profesora dijo que “para empezar no fueron consultados con la comunidad y deben preguntarle a los maestros y a los estudiantes, no es meter más cámaras, ni más patrullas que obstaculizan la entrada. En realidad la rectoría debe hacer trabajos de inteligencia, ellos saben en dónde está la droga, han dicho que sí hay pero no lo resuelven”.
Jaqueline y Sarahí, estudiantes de Ingeniería Industrial, refirieron que pese a los operativos, no ven los cambios, “yo no veo nada de vigilancia y nos da miedo salir de noche, se supone que habría policías, pero están hasta el Metro, entonces no le vemos caso”.
“Muchos hemos vivido en Ciudad Universitaria nuestro primer asalto, a mí me ocurrió por la Facultad de Medicina, fue un chavo que me agarró por detrás y con un pica hielo me pidió mochila, cartera y teléfono, y cuál policía, no había nadie a quien pedirle ayuda”, relató un estudiante.
Los alumnos mencionaron que los lugares más peligrosos son el Metrobús Centro Cultural Universitario, la Facultad de Contaduría, Medicina, las canchas de frontón, las islas y el Metro CU.
En tanto, los Consejeros Estudiantiles, Rodrigo Guerra y Andrea Peña; así como Consejeros académicos del Área de Ciencias Sociales Estudiantiles: Erwin Ortega y Patricia González y los Consejeros Técnicos, Nubia Monserrat, Daniela Narváez, María Celestino y Claudio Todd coincidieron en que “las agresiones y atropellos a los derechos humanos y la inseguridad parecen la regla de nuestra realidad”.
“Somos testigos de la violencia de nuestro tiempo. Todos los días hay que lidiar con la inseguridad y con el peligro real de la muerte. Como estudiantes y representantes consideramos que existe una necesidad de replantear el papel que tenemos, la unión, el intercambio de ideas y el debate para producir propuestas y resolver la problemática de la inseguridad. El caso de Lesby refleja la violencia e inseguridad persistente en nuestro país y claramente en nuestra universidad causando indignación y miedo en la comunidad estudiantil”, expresaron.
