Por tratarse de una delegación donde buena parte de sus habitantes pertenecen a la clase media, con una gran variedad de restaurantes, bares, importantes centros culturales, centros comerciales, bancos, unidades deportivas, una gran vida nocturna, transporte público que opera las 24 horas y una gran diversidad de avenidas para circular a todos los puntos de la CDMX sin batallar por el tránsito vehicular, esta entidad de la capital del país se ha vuelto el lugar predilecto para asaltantes, asesinos, secuestradores y violadores.
De acuerdo con la información publicada por Letra Roja, la policía capitalina se ve rebasada en muchas de las ocasiones por lo eventos delictivos que suceden a lo largo del día y que ponen a todos los que transitan por este lugar en el platillo perfecto para los asaltantes.
Los robos a transeúntes, a conductores y hasta los comensales son comunes. Pero si aunado a esto las víctimas de un atraco se resisten las consecuencias son fatales, informó el portal digital de noticias.
En lo que va del año se tienen registrados hasta hoy seis asesinatos, los cuales se encuentran impunes. Ante la problemática, y por la falta de policías para ciuidar de los habitantes de la Benito Juárez, el gobierno decidió tomar medidas que a los ojos de los capitalinos son insuficientes como, podar los árboles, iluminar las calles e instalar alarmas vecinales.
