Brujas del Mar piden valorar el aporte de las mujeres del país

Por Abigail Chávez Vera

 México.-“¿Qué pasaría si un día las mujeres no volvemos?”, es la premisa del paro nacional de mujeres convocado para hoy, el cual representa un escenario constante, una mujer sale de su casa, se dirige a su lugar de trabajo, a la escuela, a dejar a sus hijos, hacer las compras. En su camino la violencia incesante, penetrante, insoportable, se hace presente; es secuestrada, violada, asesinada; no llegó al trabajo, no asistió a clases, no está. 

El movimiento tiene como finalidad visibilizar la violencia sistemática que sufren las mujeres, mostrar empatía con las madres de las víctimas de feminicidio, conectar con la sociedad y mostrar que las mujeres también mueven al mundo, explicó en entrevista con Diario de México Fernanda Acosta, integrante de Las Brujas del Mar, colectivo feminista veracruzano que inició esta manifestación pacífica.

“También es para que nos demos cuenta de que un día sin mujeres significa una pérdida importante de dinero, eso a los empresarios y a los altos mandos no les agrada mucho, porque para ellos somos un capital”, expresó. 

“Vivir en México es vivir con miedo todo el tiempo, desde el momento en que nos vestimos, ya no podemos usar falda, ya no podemos usar vestidos, ya no podemos salir en zapatillas, ¿por qué?, porque decimos no, es que si me hacen algo no voy a poder correr, y tengo que usar pantalones, porque qué tal si me intentan agarrar la pierna”, sostuvo Fernanda al hablar del sentir común que prevalece hoy en día entre las mujeres del país. 

El llamado de Un día sin nosotras ha sido respondido por mujeres de todo México, quienes han manifestado que por un día su cotidianidad se verá interrumpida para hacer ruido, para que el silencio y la ausencia hablen del miedo generalizado que sienten. 

“No estamos en la agenda de este gobierno”

México se encuentra en el primer lugar de feminicidios en América Latina, pese a eso Fernanda Acosta sentencia que la violencia en contra de las mujeres no es una prioridad para el actual gobierno.

Una muestra de lo anterior, detalla, es el hecho de que el presidente Andrés Manuel López Obrador haya fijado en un principio que la rifa del avión presidencial sería el mismo 9 de marzo, sin importar que después modificó la fecha al 10 de marzo, eso es un mensaje “bastante fuerte”. 

“El hecho de que él quisiera iniciar su rifa ese día ya era un mensaje con una carga política, pues era como decir ‘bueno yo tengo mis prioridades, las mujeres tendrán las suyas, pero yo voy a seguir con mi agenda y con mis deberes’”, opinó. 

Añadió que pese a los intereses de la administración federal “las mujeres no vamos a parar, y menos por una persona que está más interesada en vender un avión que atender los miles de feminicidios que tenemos”. 

RECHAZAN TINTES POLÍTICOS EN SU MOVIMIENTO

Además, ante la polémica y las versiones que han surgido sobre que detrás del movimiento se encuentran partidos políticos, la activista expuso que Las Brujas del Mar es un colectivo apartidista, “no hay algún político con el que simpaticemos o que nos represente o que nos financie”. 

Incluso agregó que “lo interesante” era ver como “partidos conservadores” ahora dicen que son promotores del feminismo, que han luchado con esa consigna desde tiempo atrás, cuando, resaltó, “ningún partido ha hecho algo relevante contra la violencia de género que hemos recibido por muchos años”. 

“Aquí no es cuestión de asuntos religiosos, o de yo soy de izquierda, o de derecha; es una cuestión de mujeres” 

Las mujeres han mostrado una respuesta positiva sobre el paro nacional, de acuerdo con la integrante del colectivo feminista, pero, como suele ocurrir, las opiniones no han tardado en dividirse, sacando a la luz comentarios de ese mismo sector de la sociedad en los que se acusa que se trata de un día de asueto, o que es para las “mujeres flojas”. 

Prácticamente se trata de no atender ninguna labor, no asistir al trabajo, ni a la escuela, no atender ninguna actividad doméstica, no estar en las redes sociales, no ver televisión, no comprar absolutamente nada, “que se note la ausencia desde un ámbito social y económico”, concluyó.