Por: Patricia Guillén
@patito1811
Martha Alquisiera Morales, de 71 años de edad, vio caer su casa dos veces; la primera ocasión quedó destrozada por el sismo del 19 de septiembre, después fue reconstruida bajo el modelo de casa antisísmica; llevaba casi tres meses de obras el inmueble, pero nuevamente no soportó el temblor del pasado 16 de febrero y el hogar de doña Martha volvió a quedar hecha polvo.
Afligida y preocupada, Martha, habitante del pueblo originario de Xochimilco de San Gregorio Atlapulco dijo, “sí temo que mi casa no quede bien hecha, ya es la segunda vez que se cae por un sismo. Pero, aunque me dé miedo ¿qué es lo que puedo hacer? No sé si sea el material que están usando, si están construyendo mal, si van a apoyarnos; que nos ayuden como debe de ser, ahora con este nuevo sismo la casa no tenía con que detenerse, no tenía castillos”.
Durante un recorrido por el lugar, se constató que cerca de 10 casas antisísmicas se derrumbaron con el movimiento telúrico de este 16 de febrero. Las viviendas están ubicadas en las calles de Lázaro Cárdenas, Insurgentes, Cerrada Vicente Suárez, 13 de Septiembre y Fernando Montes de Oca.
Durante una entrevista, trabajadores de la obra, quienes prefirieron omitir su nombre, expresaron a Diario de México que las casas que construían desde hace tres o cuatro meses sí se derrumbaron por el sismo de 6.2 grados ocurrido el pasado viernes; creen que se cayeron porque les hacía falta ponerles los castillos, además de que tampoco tienen las varillas adecuadas para soportar el peso.
“Las casas se cayeron porque tenían los muros sueltos, hizo falta cimbrar y colar pero no tenemos carpintero; aquí hay seis grupos y cada uno debe tener su cuadrilla, en sí hacen falta dos carpinteros”, explicaron los obreros.
Asimismo, indicaron que es necesario que las casas, que actualmente construyen, les den mantenimiento dentro de unos dos o tres años para que éstas puedan durar, ya que “son casas tipo Infonavit con capacidad de dos niveles de carga nada más. Y deben darle mantenimiento, cambiar la tubería y la electricidad”.
Los trabajadores de la obra en San Gregorio, también refirieron que el pasado temblor del 16 de febrero derrumbó más de un millar de blocks por cada casa que estaban reconstruyendo, pues cada vivienda cuenta con un millar, y su costo es aproximado de entre nueve mil a 12 mil pesos.
Por su parte, el jefe delegacional en Xochimilco, Avelino Méndez Rangel, explicó a Diario de México que tras la nueva tragedia en San Gregorio “el término de casa antisísmica no existe, pareciera que nos dicen que no nos va a pasar nada, pero ya vimos que se cayeron los hogares”.
Avelino Méndez dijo que actualmente desconocen cuántas casas “antisísmicas” está construyendo el Gobierno capitalino en Xochimilco “que no han sido convocados ni menos informados”; además de que en la demarcación tampoco cuentan con los permisos ni licencias de construcción de dichas viviendas y desconocen quién es el Director Responsable de Obra (DRO) de los trabajos.
El funcionario detalló que en primera instancia enviará un oficio al jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera, pues luego de un estudio que realiza la Facultad de Arquitectura de la UNAM, los muros derribados por el pasado sismo fueron construidos de block hueco de 20x40x12, juenteados, con mezcla de mortero arena, que por no estar colocados los castillos no se encuentran colados.
Además de que desconocen si los terrenos fueron mejorados antes de la colocación de la plataforma de tapetate; que tampoco observan la colocación de “escalerilla” o varilla entre las hiladas de block; tampoco saben el cálculo estructural y mecánica de suelo.
