Por Nadia Venegas
Con una protesta que incluyó música, tambores y danza, integrantes de diferentes pueblos pidieron garantizar derechos de indígenas en la Constitución de la Ciudad de México.
Cerca de las 10 de la mañana inició la concentración de simpatizantes en el Ángel de la Independencia, en Paseo de la Reforma, para después dirigirse a la antigua sede del Senado, donde se discute la Carta Magna.
La demanda de los inconformes, algunos de la Asamblea de Pueblos y Barrios Originarios de la capital, es tener garantías jurídicas, políticas, de comunicación, culturales, desarrollo propio, educación, salud, acceso a la justicia, consulta pública, a la tierra, territorio y recursos naturales, además de la libre determinación y su autonomía.
La concentración llegó a la sede de Xicoténcatl 9, en el Centro Histórico, a la 1 de la tarde, donde se realizaron muestras de danza y rituales, lo cual provocó el cierre de la circulación de calle Tacuba.
Los inconformes fueron recibidos por los diputados Alejandro Encinas y Dolores Padierna, quienes adelantaron que sus peticiones quedarían plasmadas en los artículos 63, 64 y 65, pese a que en ese momento aún no se votaba.
“Llevamos adelante la consulta de los pueblos originarios e indígenas para que conocieran la propuesta que tenemos para incorporar esta Constitución, que no es otra sino el reconocimiento pleno de los derechos de los pueblos, barrios y comunidades originarios e indígenas a su territorio, a que se respeten sus formas tradicionales de gobierno, su cultura, libre expresión de las ideas, entre otros”, mencionó el legislador, quien es el presidente de esta asamblea.
Encinas adelantó que este miércoles podría discutirse el derecho al agua, donde se buscará que no se logre la privatización de este vital líquido.
La entrega de la Constitución deberá hacerse la próxima semana.
