Agencias de inteligencia estadounidenses han llegado a la conclusión de que el coronavirus SARS-Cov-2 es de origen natural y que no se encuentra genéticamente modificado, aunque se investiga la posibilidad de que haya sido liberado tras un accidente de laboratorio en China.
Lo anterior fue declarado por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (DNI, por sus siglas en inglés), el centro que concentra e informa directamente al presidente de Estados Unidos sobre las actividades y reportes de todas las agencias de aquel país.
En días pasados, Donald Trump había sugerido que SARS-Cov-2 (nombre con el que se conoce al virus que produce la enfermedad Covid-19) era un arma biológica creada por el gobierno chino, liberada accidentalmente en un laboratorio de la ciudad de Wuhan.
A pesar de esto, se continuará investigando si el brote surgió a partir del contacto con animales infectados o si fue resultado de un accidente de laboratorio.
Cabe mencionar que la comunidad científica internacional y la Organización Mundial de la Salud ya habían echado por tierra esta hipótesis anteriormente, pues en caso de que el virus fuese artificial, contendría rastros genéticos de los otros virus con los que fue creado. Se cree que el origen del patógeno es la selección natural, es decir, la mutación en la naturaleza.
#ULTIMAHORA Inteligencia EEUU: virus de COVID-19 no fue fabricado ni alterado, pero estudia si hubo accidente en laboratorio chino
— AP Noticias (@AP_Noticias) April 30, 2020
Con información de AP/ JMCG
