Cuando llueve

Las noticias en el mundillo futbolístico han salido de forma atropellada y contundente. Luego del repentino cese de Ricardo Peláez en la vicepresidencia deportiva del América, ahora se da a conocer que José Romano también sale de la organización así como el responsable de la “inteligencia deportiva”, Mario Hernández Lash.

El mérito de Romano ha sido, aparte de ser bien simpático, su amistad con los mandones de la empresa y de Mario, su mayor entorchado es haber jugado la “Copa Morelos” en mi adorada Cuernavaca, o sea que el futbol puede seguir sin ellos.

Lo que si no acabo de digerir es la forma tan desaseada en que la dirigencia de los Pumas dio a conocer la salida de Darío Anastasio Verón. El gran capitán es el último símbolo de la sangre azul y la piel dorada y si terminó su ciclo, digo, por lo menos que lo anuncie el presidente y no otro directivo. La temporada fue un desastre y a Paco Palencia se le salió el agua de la alberca, pero no fue culpa sólo de Darío. Ojalá pueda encontrar acomodo en otro club porque creo que, en la posición correcta, tiene para un par de años más.

También el cuadro del Pedregal anuncia que no renovará al Pikolín Alejandro Palacios ni al contención Abraham González. Lo del arquero se entiende porque ya no es ningún chavito y Alfredo Saldívar es un tipo confiable, pero lo del español, ¡chale!, en un caballo de hierro y se adaptó de volada al balompié nacional. En fin, ojalá no los echemos de menos.

Carlos Hugo López Chargoy, supuesto propietario del Puebla, ha manifestado su deseo de vender al cuadro de La Franja. Otro caso de incongruencia deportiva, administrativa y económica. Esta familia contribuyó de manera decisiva al descenso de Jaguares y las lenguas de doble filo afirman que no son más que prestanombres de los gobernadores de Chiapas y Puebla. Por lo pronto, no renovaron a José Saturnino Cardozo como entrenador. El paraguayo tampoco hizo una campaña como para decir ¡qué bárbaro! pero contribuyó a su salvación. Ojalá en la FEMEXFUT se vuelvan más selectivos a la hora de dejar entrar directivos.

Por el rumbo de La Noria se publicó la lista de transferibles de Cruz Azul donde destacan los nombres de Joao Rojas y Jorge Benítez. También se va el Maza Rodríguez y aunque usted no lo crea, siguen perteneciendo a La Máquina Lucas Silva y Marc Crosas.

Lo increíble es que no se hable de refuerzos. Alguien está empeñado en hacer las cosas perfectamente mal al interior del feudo celeste.

Hoy viajan a Seúl, Corea, Roberto García Orozco y César Ramos para participar en el mundial Sub 20. La mejor de las suertes.

Entre noticias y chismes, como que el Piojo Miguel Herrera regresa a Coapa, estamos invadidos. No cabe duda que, como decía mi abuela, cuando llueve, graniza.