CIUDAD DE MÉXICO.- Diablos Rojos inaugura con derrota el estadio Alfredo Harp Helú, al ser apaleados 11-2 por los Padres de San Diego, en una noche especial para la afición, a la que no le importó caer en el estreno de su nueva casa y se vivió un ambiente de fiesta.
El invitado de honor a la inauguración fue el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien a la salida al campo fue abucheado por un sector de la afición, acción que no pasó desapercibida para el mandatario, quien en su discurso les dejó un mensaje a los que lo atacaron desde la tribuna.
“No voy a hablar mucho porque hay algunos de la porra del equipo fifí, pero la mayoría de la gente está a favor del cambio y a favor del deporte”, señaló López Obrador, al tiempo de asegurar que impulsarán todos los deportes y también el beisbol.
El Presidente de México definió al beisbol como una pasión fecunda que requiere de cabeza, de corazón y de carácter, después agradeció a Alfredo Harp Helú y antes de dar paso al primer lanzamiento, concluyó su intervención con una analogía del ‘Rey de los Deportes’ y aseguró que “vamos a seguir ponchando a los de la mafia del poder”.
Othón Díaz, presidente ejecutivo de la organización escarlata fungió de cátcher de López Obrador, quien lanzó la primera bola unos metros delante de la lomita.
Desde la entrada inicial se conectó el primer hit del ‘diamante infernal’, a cargo de Xavier Edwards, mientras que los ‘Pingos’ se llevaron un susto en el segundo inning, con un batazo de Owen Miller que parecía que sería el primer home run, pero Carlos Figueroa se quedó la bola al fondo del jardín central.
La primera carrera en la historia del estadio fue a favor de los Diablos Rojos y cayó con un elevado de Adonis García, seguido de un pisa y corre de Armando Araiza.
La debacle de la ‘Pandilla Escarlata’ comenzó a escribirse en la cuarta entrada, luego de que, con casa llena, Gabriel Arias conectó un doble que empujó dos carreras para la voltereta, después un par de elevados de sacrificio les dieron el 4-1 a los ‘frailes de California’.
Con Octavio Acosta en el diamante, Jeisson Rosario empujó la quinta con un batazo a segunda, para que Hudson Potts aprovechara para correr a home. Después, un hit de Blake Hunt pegadito a la línea de primera permitió que Arias cruzara la almohadilla (6-1).
Con un hombre en los senderos, el jardinero estadounidense Michael Gettys se apuntó el primer cuadrangular en la historia del Estadio Alfredo Harp Helú, para aumentar a 8-1 la ventaja.
En la fatídica séptima cayeron tres más para los Padres, con lo que se confirmó la paliza, el resto quedará para la anécdota, con un espontaneo que por poco hace el recorrido de todas las bases, en la novena entrada se fue la luz, el público resistió con el buen tino del DJ y la noche cerró con un ambiente festivo, con la afición escarlata que cantaba a capela.
Después de muchas canciones, cervezas y varios minutos, volvió la luz, se reanudó la última entrada y Diablos Rojos le puso la última rayita a la pizarra, con hit productor de Juan Carlos Ureña, para que anotara el ‘Caballo’ Figueroa dejara el marcador 11-2 en favor de San Diego.
Por José Luis Rivera Soltero | @jlgoooya
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