El Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, alberga la obra "Sin permiso y sin popote"

Ciudad de México.- El espectáculo se exhibirá el día sábado 24 y domingo 25 de noviembre en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.

Con un tono de cabaret teatral, el espectáculo Regina Orozco. Sin permiso y sin popote. Cabaret autosustentable narra la aventura de una mujer que trata de luchar por todas las causas que se le ponen enfrente. “Entiendo que esto de las luchas sociales es parte de haber encarnado en la Tierra. Uno debe venir a aprender porque si no, entonces te aburres”, afirma la artista.

La obra "Sin permiso y sin popote"

Todo comienza con una historia de amor. “Esta mujer conoce a un chico cubano que se dedica a recoger basura, así que piensa 'me lo voy a ligar recogiendo basura'. Pero recolectan tantas botellas de PET que ya no saben donde ponerla”. Llega la primera desilusión: el novio la golpea. Así que pasa de querer rescatar la naturaleza a redignificar a las mujeres.

“Comienza a reunirse con otras mujeres que fueron víctimas de la violencia y empiezan a peregrinar. Llegan a la casa de Lydia Cacho”. En total son unas 80 mujeres que tocan a la puerta del hogar de la periodista, una de las activistas más reconocidas en la lucha por los derechos humanos. Pero no está en México, se fue al extranjero a recibir un reconocimiento. Pero no importa, las mujeres de todos modos entran a su casa y arrasan con lo que hay en el refrigerador de tanta hambre que tenían y con los kleenex de tanto llorar sus penas.

En la parte musical de Regina Orozco. Sin permiso y sin popote. Cabaret autosustentable se escucharán temas  que cantaron y compusieron, entre otros, Mercedes Sosa, Nacha Guevara, David Aguilar, Alejandro Lernes, Silvio Rodríguez, Víctor Jara y Liliana Felipe. “Es música para entender los problemas del mundo, es profunda y conmovedora”, dice Orozco. Entre otras, cantará Sólo le pido a DiosMaría, MaríaSe equivoco la palomaCoincidirOjalá, Gracias a la vida  y A todo pulmón.

Y al centro de todo eso, una Regina Orozco como nunca antes se había visto. No sólo porque el espectáculo es totalmente nuevo sino porque Regina ahora está inspirada en una palabra: esperanza. Este nuevo estado de ánimo de la también soprano (ha cantado en seis óperas) se mezcla con el humor que la ha caracterizado. Es por eso que lleva a su personaje un poco más allá de lo que ella ha vivido.

“Cuando abraza la lucha contra el estigma de la belleza y la discriminación por su gordura, que es algo que yo he vivido, el personaje decide que la mejor forma de hacerlo es desnudándose y entonces termina marchando con Los 400 pueblos”, subraya la artista.

Pero la historia no termina ahí. La policía la arresta por exhibicionista y ahí, obviamente, encuentra otra causa por la cual luchar. “La anécdota es similar a lo que vivimos ahora con las redes sociales. Es una herramienta muy útil pero también nos acerca a la frustración porque es horrible que ves videos de una desolación espantosa, gente viviendo en la miseria, perros masacrados, mujeres violadas…”, culminó.