Actor mexicano Humberto Busto entra en la cabeza de un caníbal en pódcast

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El actor mexicano Humberto Busto entró en la cabeza de un criminal en el pódcast "Gumaro de Dios, el caníbal", un trabajo basado en la investigación de Alejandro Almazán que narra la trágica historia de un delincuente en un mundo de pobreza, violencia y machismo, y a su vez reflexiona sobre el quehacer periodístico.

"Es una historia muy triste porque aunque el hecho del canibalismo y el asesinato que cometió (Gumaro) de su pareja, y el devorarle ciertos órganos del cuerpo, evidentemente es un delito (...) detrás de eso existe una coyuntura de situaciones que él vivió en la infancia y que te ponen a pensar en las condiciones en las que crecen muchos de los mexicanos", cuenta este martes el actor en entrevista con Efe.

El nombre de Gumaro de Dios trascendió en 2004 cuando se hizo pública la existencia del llamado Caníbal del Caribe. La atroz historia de un joven en sus veintes que devoró a su pareja sentimental y horrorizó a la población, creando una leyenda.

En aquel entonces el periodista Almazán decidió viajar a la cárcel en la que se encontraba recluido Gumaro para entrevistarlo e intentar entender de dónde venían las acciones tan atroces que había cometido y poder contar su historia.

Sin intenciones de justificarlo, para Humberto, hay que tomar en cuenta tres puntos fundamentales para entender el caso de Gumaro.

"Las condiciones económicas de vivir en la absoluta pobreza, la falta de discernir e identificar un caso de esquizofrenia latente desde antes de que se convierta en una tragedia como esta, y un entorno machista que lo obligó a entrar a la milicia y tener que pelear en vez de asumir su propia identidad homosexual", responde.

Por eso a lo largo de la historia se van tejiendo reflexiones, tanto de ética periodística realizadas por Almazán, como sociales en general que hacen que el caso no permanezca como un hecho aislado de generación espontánea.

"Con Alejandro hablaba del final de la serie, nos preguntábamos ¿cuál era la imagen final que queríamos dejar de él? Si el de un enjuiciamiento moral superior por esa acción tan horrenda o darle una mayor dignidad y dimensión porque muchas de esas cosas no las hubiera hecho si alguien le hubiera echado la mano", cuenta el actor.

EL PLACER DE LA CONDICIÓN HUMANA

Desde el punto de vista de Busto, en la actualidad hay una fascinación "por las historias que develan la condición humana" y considera que la serie "Gumaro de Dios, el caníbal" es un ejemplo de ello.

"Como actor creo que siempre hay un placer en los personajes que rayan en la locura porque puedes jugar con ellos de varias maneras. Siempre me parece apasionante descubrir cómo la psique humana puede estar en absoluta contradicción y peleando con sus demonios", relata.

Entre las reflexiones más fuertes a las que llegó a partir de este proyecto, está el darse cuenta de que "todos hacemos las cosas por una razón interna y por circunstancias específicas".

Encontrar esas razones es algo que lo mueve como actor, pues lo acerca a la razón de existir de cada ser humano y lo ayuda a ampliar "la visión" que se tiene de la gente.

También cree que el mostrar historias como la de Gumaro ayuda a entender mejor los vicios de la sociedad para de esa manera "seguir luchando por los valores y derechos que deben de ser protegidos en el país", señala.

TECNOLOGÍA AUDIBLE

El pódcast, que se estrenó este martes por Podimo, y que mantendrá un capitulo nuevo semanalmente, está grabado bajo la tecnología binaural que permite que los espectadores tengan la percepción de que el sonido está en movimiento.

Este efecto hace la experiencia del pódcast "más teatral que radiofónica", apunta Busto.

Por su parte, Humberto espera el estreno de la serie de Netflix, "Donde hubo fuego", la ópera prima de Lorena Padilla llamada "Martínez" y se sigue preparando para "Bisonte", su primer largometraje como director.

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