María José Magán: La muerte no es como la pintan, en 'Un día para vivir'
Por Carlos Meraz
El filósofo, político y escritor romano Séneca precisó: “La muerte es un castigo para algunos, para otros un regalo, y para muchos un favor”. El emisario de la parca no necesariamente tiene figura esquelética, porta una andrajosa túnica y mucho menos empuña una ostentosa guadaña; es más, puede ser una bella mujer, de castaña cabellera, mirada celeste, con impecable maquillaje y vestido formal rematado con tacones de aguja, que se materializa para ofrecer segundas oportunidades y así los condenados resuelvan pendientes antes de dejar el plano terrenal.
De eso y mucho más trata Un día para vivir, la serie de Azteca 7 que está de vuelta el 22 de agosto a las 20:30 horas con una segunda temporada de 60 episodios, protagonizados por la actriz de origen venezolano María José Magán, como Ella, la enigmática mensajera que ofrece 24 horas para cambiar el destino y demostrar que no siempre todo está escrito por designios divinos.
“Sigue siendo la misma muerte, sólo que recargada, más hermosa, cínica, hipnotizante e irónica, con temas más fuertes que antes, que no se habían manejado ni siquiera en TV Azteca, por ejemplo, hay un capítulo de un transexual o de un niño buleado que cobra venganza llevando un arma al colegio.
“Llevamos grabados 49 episodios y ya se piensa en una tercera temporada, pues el concepto da para muchas engregas”, advirtió.
HISTORIAS DE VIDA Y MUERTE
La oscura y misteriosa dama de entidad antropomórfica, recreada por María José Magán en el programa unitario de TV Azteca, es reconocida en la sabiduría popular por ser la más democrática, al ejercer estoicamente sin distinción alguna, pero también por ser la más caprichosa, a veces piadosa y otras inclemente.
“Son historias también de vidas y de cómo todo lo que haces tiene una consecuencia, eso que llamamos libre albedrío.
“La muerte no es el fin del camino, sino su continuación, y aunque la muerte es la protagonista el mensaje siempre es de vida y aprendizaje. No sé si haya vida en el más allá, pero creo que existen vidas pasadas y futuras, así que venimos a aprender, practicar y enseñar”, precisó.
Un día para vivir cuenta con guiones de Héctor Forero y David Mascareño, dirigida por Raúl Caballero y Daniel Aguirre, con dirección de fotografía de Jorge Rubio, producción asociada de Martín Garza Cisneros y producción ejecutiva a cargo de Adrián Ortega Echegollén, también vicepresidente de Azteca 7.
Paradójicamente, al final, en el juego de la vida, la muerte siempre gana… incluso está tan segura de su triunfo que hasta nos da toda una vida de ventaja. Ante la irremediable derrota existencial, sólo nos resta creer que la vida es bella, porque puede no serlo o llegar a serlo… Liberum arbitrium.
