Por Carlos Meraz
El novelista español Miguel Delibes sentenció: “La medicina ha prolongado nuestra vida, pero no nos ha facilitado una buena razón para seguir viviendo”. La empatía con el paciente es tan importante y definitiva como la consulta, la receta y el tratamiento, ya que el arquetipo del médico del Siglo XXI debe ser el influencer de sus pacientes.
Esa es la evaluación teórico-práctica hacia la profesión hecha por Mr. Doctor —un personaje mediático de las redes sociales, cuya legión de fieles seguidores se potenció durante la pandemia—, un galeno poblano con especialidad en medicina interna cuyo nombre es Octavio Arroyo, quien en la actualidad supera los 1.4 millones de suscriptores tan sólo en su canal de YouTube y que ostenta el slogan “un médico que comunica”.
“Llevo cuatro años con mis cápsulas en YouTube y mi objetivo es llevar la medicina a más personas, con información desde un simple dolor de cabeza hasta la prevención de enfermedades. Para eso tengo que ser un youtuber que hable de medicina y así difundirla a través del entretenimiento.
“Yo busco generar empatía y no ser un juzgador, pues más que un verdugo un médico debe ser un acompañante del enfermo, su coach, debe ser un influencer de sus pacientes”, advirtió.
LA RISA, LA MEDICINA BARATA
Mr. Doctor es un partidario incondicional de aquella frase acuñada por el poeta y partisano británico Lord Byron: “Siempre ríe cuando puedas. Es medicina barata”.
“Yo siempre he creído que de nada sirve tener talento si no das espectáculo”, aseguró.
Fuera de las redes sociales, el también conferencista tiene su consultorio en Puebla, donde muchos de sus pacientes llegaron a él a través de su exposición mediática.
“A nivel salud los grandes retos son apostar a la alimentación nutritiva y el ejercicio desde etapa preescolar, pues la mejor medicina es nuestra alimentación; llevar estos conocimientos a los colegas, ya que es triste que algunos no sepan lo básico en enfermedades que atacan a gran parte de nuestra población, como diabetes, obesidad e hipertensión; la salud emocional; la importancia del sueño y la salud digestiva, porque el intestino es el segundo cerebro del cuerpo.
“Además de combatir la ignorancia y a los charlatanes que te quieren curar con la ayahuasca o que como Bárbara de Regil vende sus productos para tonificar el abdómen, cuando la salud y el ejercicio no necesariamente tienen que ver con lo estético”, concluyó.
