Valdo Rodríguez: Las letras lo tiran y el sonido lo levanta

Foto: @valdo_musica

 

 

Por Carlos Meraz

El literato francés Gustave Flaubert sentenció: “Cuidado con la tristeza, es un vicio”. Ser un triste crónico que asume estoico la melancolía, incluso ya hasta la disfruta y rechaza apartarla de su vida, es el estilo que musicalmente define al creador de lo que él denomina como  sad bailable: Valdo Rodríguez.

El músico indie capitalino es un adicto confeso a la tristeza, que propone un estilo cuyas letras anímicamente lo tiran, pero el rítmico sonido suele levantarlo, en una propuesta de baile del dolor que lanza este viernes, 25 de noviembre, en su segundo EP.

Bajo el título de El bueno, el malo y el triste, el álbum parafrasea al épico spaghetti western de 1966, en la película The good, the bad and the ugly, dirigida por Sergio Leone y protagonizada por Clint Eastwood.

“También el título es homónimo al disco de Willie Colón y Héctor Lavoe de 1974. Cada canción marca una etapa o sentir de los personajes —el bueno, el malo y el triste—, es un álbum conceptual con cuatro tracks inéditos: Perder el control, Un WhattsApp, Renina y Gansito frío.

SE VERÁ EL BEAT DEL DOLOR 

Valdo Rodríguez destacó que también en el plano audiovisual, El bueno, el malo y el triste contará con un trabajo conceptual.

“Tendrá un video largo que contará las cuatro canciones, con una duración de 15 a 20 minutos y también se estrenará este viernes.

“En el video se ve desde el Valdo más ñoño, retraído, tímido, hasta el más atrevido y egocéntrico, en un viaje entre tres personajes”, explicó.

El músico emergente de 23 años  —que en sus más recientees composiciones derrocha versatilidad, ya que puede pasar del pop al trap y detonar en el rock en cuestión de dos minutos—  destacó que para 2023 emprenderá una gira nacional, titulada El malo.

A lo largo de tres años ha  alternado en escena con artistas como Javier Blake, Camilo Séptimo, Odisseo, La Gusana Ciega, Tecnicolor Fabrics, Costera y  la escocesa KT Tunstall, entre otros.

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