Por Abigail Chávez Vera
México.-Fátima, una pequeña de siete años abusada sexualmente y asesinada, e Ingrid, una joven desollada presuntamente por su pareja sentimental, se han vuelto casos “emblemáticos”, estandartes en los últimos meses de una “problemática general que debemos de atacar”, señaló en entrevista con Diario de México, Mario Salomón Pineda, country manager de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial (GMSI).
Refirió que en los últimos cinco años, los feminicidios en México han aumentado 137 por ciento, cuatro veces más que los homicidios en el país, de acuerdo con cifras de la Fiscalía General de la República (FGR).
Salomón Pineda enfatizó que muestra de ello lo evidencian los primeros 12 meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, tiempo en el que se registraron mil 60 casos de ese delito, de los que, dos ocasionaron indignación generalizada entre la sociedad, ambos ocurridos en la Ciudad de México —donde gobierna Morena—, uno contra una niña y otro contra una joven de apenas 26 años, sin embargo, dijo, las estadísticas muestran que estos son solo una muestra de la violencia generalizada que impera en México.
“Se ha generado tanta violencia en el país que lo que nos preocupa es que lo empecemos a ver como algo normal, de la misma manera el aumento de feminicidios se ha vuelto alarmante”, indicó el especialista en seguridad al hablar sobre un escenario en que estos crímenes, ante la alta incidencia, se comiencen a ver como cotidianos, y por lo tanto, se normalicen en la vida de cada mexicano.
Una muestra de lo anterior es que en los últimos cuatro años y medio solo uno de cada cinco asesinatos de mujeres se han investigado como feminicidios, debido a que las fiscalías a lo largo del país lo normalizan y terminan clasificando esos delitos como homicidios.
Por otro lado, el especialista agregó que “afortunadamente en estos días se ha dado una reacción por parte de la sociedad muy positiva”, “es lo que queremos que suceda, no que se normalice (en alusión a la alta espiral delictiva)”.
Ante la exigencia de justicia por parte de la ciudadanía, indicó que el gobierno federal debe tomar las medidas pertinentes para tratar esta ola de violencia contra las mujeres, aunque apuntó que hasta el momento “no se ha visto algo bien articulado”.
Uno de los principales problemas al momento de investigar o denunciar un feminicidio, indicó, es que ni el personal de los ministerios públicos, ni los policías están bien capacitados, por lo que “no hay un proceso adecuando” y este termina por estancarse y propiciando que impere la impunidad.
