El maíz chinampero pierde terreno por aumento de la mancha urbana

Redacción

Ciudad de México.- El maíz chinampero es una variedad única en el mundo, adaptada a los suelos húmedos y salitrosos de la zona lacustre en Tláhuac y Xochimilco. Su mazorca de gran tamaño y granos suaves blanco, rojo o azulado tiene un sabor dulce al paladar, sin embargo, durante más de medio siglo ha ido perdiendo terreno para su cultivo por el crecimiento de la mancha urbana o al ser remplazado por otras plantaciones, bajo un modelo de agricultura que promovió el uso de químicos y el deterioro de las tierras.

Por ello, desde 2019, la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr) ha implementado una estrategia integral para revertir el daño y rescatar el maíz y la cosmovisión de los pueblos que lo cultivan. La estrategia contempla la transición agroecológica y la sensibilización de los productores, apoyos económicos, capacitación para la selección masal en campo y pruebas moleculares (PCR-RT) para detectar la presencia de transgenes.

Y es que la Corenadr señala que la importancia de este grano es que es fruto del cruce entre las razas Cónico y Chalqueño, resultado de un minucioso trabajo de selección realizado por las manos campesinas a través de los siglos.

DETALLAN CONSERVACIÓN

“Actualmente, se promueve la conservación in situ en parcelas de producción y mejoramiento, así como en bancos de semillas comunitarios. Además, se trabaja en la construcción de la “Casa de Semillas Toxinachcal”, un banco de semillas nativas que servirá para resguardar el patrimonio genético, con la capacidad de préstamo de material, el repoblamiento de un cultivo en casos críticos de contingencia, así como el mejoramiento participativo para su adaptación en cada comunidad o ante el cambio climático, una función estratégica en términos de la soberanía alimentaria”, indicó en un comunicado esta instancia dependiente de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema).

La Corenadr abundó que estos trabajos se llevan a cabo en el marco del programa Altépetl Bienestar, impulsado por Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de Gobierno y cuyos alcances benefician a 217 productores de maíz en chinampa y humedales de las zonas lacustres en Tláhuac y Xochimilco, quienes cultivan más de 66 hectáreas de este cereal. Los pueblos que aún conservan esta tradición son: San Andrés Mixquic, San Gregorio Atlapulco, San Juan Ixtayopa, San Luis Tlaxialtemalco, San Pedro Tláhuas y Santiago Tulyehualco.

IMPARTEN CAPACITACIÓN

Indicó que a través de la Comunidades de Aprendizaje Campesino (CAC), imparte capacitación permanente, en colaboración con el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) para la selección masal de granos.

Basta recordar que la zona chinampera en Tláhuac y Xochimilco es un sistema agrícola prehispánico, que consiste en islas artificiales construidas por los pueblos rivereños sobre lo que fuera el lago de Texcoco. Alberga el 2% de la biodiversidad mundial y el 11% de la nacional. Esta forma de agricultura sustentable ha sido reconocida por la Unesco como Patrimonio Cultural de la Humanidad. Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) allí las comunidades sostienen una agricultura diversificada, con una producción anual de 40 mil toneladas de alimentos y 131 especies de flores ornamentales.

IMCM