Ciudad de México.- El presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que piensa pasar de la “austeridad republicana” a la “pobreza franciscana”, para darle más al pueblo.
“Si ya estoy pensando que le vamos a dar otra vuelta a la tuerca porque hace falta darle más al pueblo y a ver si es posible pasar de la austeridad republicana a una fase superior, que podría llamarse pobreza franciscana, para todos”, afirmó.
López Obrador dijo que se tienen que acabar “por completo los lujos, no puede haber gobierno rico con pueblo pobre, es que se mal acostumbraron, se les olvidó que somos servidores públicos, para qué se meten al servicio público si lo que quieren es hacer dinero o tener de más”.
Recomendó que aquellos funcionarios que busquen ganar más dinero participen en el sector privado o en negocios particulares.
“¿Qué no da pena? ¿Qué no se puede ser austero? ¿Qué no el poder es humildad? Pero si andan con esas ínfulas de superioridad y de fantochería y quieren comer en restaurantes caros y tomar vinos de importación y vivir muy por encima de cómo vive la gente, pues que no opten por el servicio público, como decía el poeta, nadie tiene derecho a lo superfluo mientras existan seres humanos que carecen hasta de lo más indispensable, eso es parafraseando a Díaz Mirón”, señaló.
Aseguró que la austeridad la ha recomendado a sus colaboradores y a sus propios hijos, para que se alejen de las tentaciones que provoca el dinero.
“¿Dinero para qué? Los viajes al extranjero, ¿qué ya no existe el sistema de telecomunicaciones? Y se logran muchísimos ahorros en todo lo que llaman gasto operativo”, expuso.
Lo anterior se dio al afirmar que el poder Ejecutivo no tiene injerencia en la modificación al presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE) y otros órganos autónomos, ya que fue cuestionado sobre la invalidación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) al recorte de la Cámara de Diputado del 26% al presupuesto solicitado por el órgano electoral.
