Guía para proteger y reparar la piel ante los efectos nocivos del sol

El comienzo de la primavera trae consigo el calor y, por ende, es necesario poner aún más atención al aspecto de la protección solar. Cuando la piel no se blinda de forma adecuada, corre el riesgo de dañarse; además, si no se le atiende a la brevedad después de una exposición prolongada bajo el sol, las consecuencias pueden ser fatales.

Ahora, más que nunca, es esencial tener una rutina de skincare con productos de una farmacia dermatológica que garanticen su efectividad contra los efectos nocivos de los rayos solares y, asimismo, adoptar hábitos inteligentes como los que te daremos en esta guía. ¡Quédate para conocer más!

  1. Escoge un protector solar perfecto para ti 

En primera instancia, revisemos cuáles son los tipos que existen:

  • Minerales (físicos): funcionan como espejos, se asientan en la superficie de la piel y brindan protección contra los rayos UVA y UVB. Son perfectos para pieles sensibles, también se inclinan a ser más hidratantes, aunque pueden llegar a ser pesados y difíciles de difuminar. Se aconseja adquirir uno con formulaciones mate.
  • Químicos: llegan a las capas más profundas de la piel con el propósito de absorber los rayos ultravioleta y convertirlos en calor que se libera del cuerpo. Es ideal para quienes realizan actividades al aire libre o practican natación.

 Ahora bien, cada persona tiene un tipo de piel diferente, ¿sabes a qué categoría pertenece la tuya? Es vital contar con este dato para determinar los ingredientes que más te beneficiarán.

Si tu piel es grasa, el óxido de zinc y el dióxido de titanio te ayudarán a absorber el exceso de sebo; a las pieles mixtas se les recomiendan protectores con fórmulas ligeras, pero hidratantes, mientras que a las pieles maduras, se les sugiere escoger productos con vitamina C o E.

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El tema del número SPF (Sun Protection Factor o “Factor de Protección Solar”) igualmente importa, un SPF 15 filtra el 93% de los rayos UVB, mientras que el 30 consigue una filtración de 97%. Lo recomendado es un protector con SPF 50 o 70+, ¡pero no los combines! Hacerlo quiere decir que tendrás un escudo más grueso en la piel y solo desperdiciarás producto.

Por último, asegúrate de que sea resistente al agua y tenga protección de amplio espectro, es decir, que sea efectivo en cuidarte de la radiación UVA y UVB equilibradamente.

  1. Aplica tu protector solar de forma correcta

  • Coloca puntos a lo largo del rostro: en la frente, las mejillas, la punta de la nariz, la barbilla y en el cuello.
  • Utiliza tus dedos para extenderlo por la piel con movimientos similares a toquecitos que vayan de arriba hacia abajo.

 

Consejos extras:

  • Hidrata la piel primero.
  • Usa una cantidad moderada, que no sea ni mucho, ni poco.
  • Espera 20 minutos a que se absorba antes de maquillarte o salir.
  • ¡No mezcles protectores!
  • También póntelo en orejas, manos y toda parte del cuerpo que vaya a estar expuesta al sol.
  • Reaplícalo cada 2 horas, incluso si te quedas en casa o si el día está nublado.

 

  1. ¡Cuídate del sol!

La protección solar ayuda, pero no es la única medida que puedes tomar.

Evita exponerte a la luz solar

En primavera, el índice de UV es más alto entre las 10 AM y las 4 PM, por lo tanto, haz todo lo posible por mantenerte bajo la sobra e incluir en tu outfit un sombrero y lentes de sol.

Protégete con ropa   

Puedes ponerte protector solar en aquellas partes del cuerpo que no estén cubiertas por la ropa, sin embargo, también es recomendable usar prendas que le sirvan a la piel como escudo, secas y de colores oscuros.

Dile no a las camas de bronceado

Los rayos UVA y UVB que emiten son altamente perjudiciales, usarlas aumenta el riesgo de desarrollar cáncer en la piel, envejecer prematuramente, causar quemaduras, e incluso, provocar daño ocular.

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  1. Trata tu piel dañada por el sol

Si no pudiste tomar las precauciones pertinentes y te encuentras en esta situación, entonces lo más seguro es que, al tocarte, detectes inflamación y dolor en la zona horas después de haberte expuesto a los rayos solares.

Recurrir a un gel, crema o loción humectante, te brindará alivio y, dependiendo de la formulación de los productos, puede ayudarte a reparar la piel siempre y cuando se trate de quemaduras leves o moderadas.

Ve al médico si notas la aparición de ampollas grandes con signos de infección, si el dolor incrementa, o si los malestares no se van con el paso de los días.

Conclusiones

Es hora de tomarse en serio el tema. ¿Estás usando un protector solar apto para ti? ¿Procuras limitar tu exposición al sol? No dejes pasar más tiempo, desde hoy puedes comenzar checando la fórmula de tu protector o adquirir uno en caso de que todavía no lo hayas implementado a tu skincare.

La gama de productos de SkinCeuticals están enfocados en cuidar la piel de los rayos UVA y UVB a través de diferentes ingredientes de alta calidad. Conócelos y disfruta de la primavera sin miedo.