NUEVA YORK.- Serena Williams era la gran favorita para imponerse a Naomi Osaka en la final femenil del US Open, pero fue víctima de su carácter y solita le dejó el camino libre a la japonesa para coronarse en sets seguidos. Los berrinches le costaron tres multas a la tenista estadounidense para un total de 17 mil dólares.
La primera sanción para Williams fue de 4 mil dólares por coaching, al establecer contacto con su entrenador, lo que detonó la molestia de la jugadora, quien a partir de ese momento perdió la concentración en el resto del partido.
La segunda multa fue de 3 mil dólares por estrellar su raqueta luego de quiebre clave, que le costó una penalidad de un punto, pero además, a partir de ahí inició el drama y los reclamos hacia el juez de silla, a quien le exigió una disculpa que nunca llegó.
“Me robaste, no me vas a dirigir nunca más en tu vida. Usted es un ladrón, un mentiroso. Me debe una disculpa”, le reclamó entre lágrimas Serena Williams al juez Carlos Ramos.
Esta última acción le costó los otros 10 mil dólares a la norteamericana, por abuso verbal y en el partido se le penalizó con un game entero. El total de la multa es tan sólo el 1% del premio de 1,850 mil dólares que se llevó Serena Williams por llegar a la final del Abierto de Estados Unidos.
JLR
