Se hace llamar Sam Adonis y cuando sale a escena el público de la Arena México enardece debido a que se considera un seguidor del controvertido presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El gladiador estadounidense es originario de Tampa, Pittsburgh, suele presentarse ante los aficionaos con un una bandera de su país natal que destaca por tener el rostro de Trump al centro. Sus pantaloncillos también suelen mostrar una caricatura del presidente, aspectos por los que los seguidores del Consejo Mundial de Lucha Libre lo acaban con insultos o el cántico de “México. México”.
“Lo escucho todo, los aficionados se la pasan gritando palabrotas hacia a mí. Se la pasan tirándome cerveza y palomitas de maíz desde las tribunas”, narra el luchador rubio, quien asegura que las fans lo catalogan como el “nuevo guapo de la lucha libre”.
Pese al repudio hacia, Adonis explica que después de cada show en la Arena México los seguidores suelen buscarlo para pedirle fotos y autógrafos, pues al final de cuentas, todo es parte de un simple personaje.
“Fui yo quien decidió crear un personaje un poco más extremo para dejar que los aficionados se enojen, pero todo el mundo sabe que no tiene nada que ver con el odio hacia los mexicanos”.
