Por Luis Manuel Novelo Anaya
Naucalpan.- Cubro el perfil, tengo los conocimientos y la experiencia para sacar está encomienda adelante y si no doy el ancho me retiro, afirmó Pablo Francisco Rosas Olmos, comisario de Naucalpan, quien informó que se dejaron de pagar los controles de confianza en la anterior administración, pero ya se retomaron.
Rosas Olmos también aseguró que los operativos, realizados de manera coordinada con la policía estatal, la Fiscalía, las delegaciones de la ciudad de México y los intermunicipales, han dado resultados positivos, al reforzar las fronteras con las unidades de bloqueo y el intercambio de información.
Especialista en inteligencia, análisis financiero, prevención de lavado de dinero, abogado con maestrías, certificaciones y vocación policiaca, quien se dice orgulloso de ser naucalpense y portar el uniforme de la corporación que encabeza, Pablo Rosas Olmos, afirmó que la supervisión será la base del éxito para dar resultados, pero atenderá y escuchará a la gente y a los policías para dar soluciones.
La encomienda que le dio la presidenta municipal Angélica Moya, señaló el comisario, es brindar mayor seguridad a los naucalpenses, y prueba de ello son las 56 unidades automotoras robadas en territorio naucalpense, que fueron recuperadas en apenas mes y medio.
El comisario, señaló que, para combatir la corrupción, se habrá de tener mayor supervisión, así como capacitación y la rotación del personal en la Comisaría, porque los controles de confianza se acabaron en la anterior administración por la deuda que se tenía, pero la presidenta Angélica Moya está muy interesada en que se cumplan esos requisitos, lo cual es muy importante para que se tenga una policía confiable, indicó, y aseguró que durante su gestión no hay ni habrá cuotas.
Pablo Rosas Olmos reconoció que recibieron una corporación con muchas carencias y se ha dado de baja a 37 elementos, pero que es un error pensar que todos los elementos son malos, pues hay muchos policías que tienen una vocación real de servir y él está en la calle al pendiente de los operativos y labores policiacas, de la mano con la ciudadanía, porque la supervisión a la policía es fundamental para una mejor seguridad.
