Bloquearon vialidades en protesta contra la extinción de rutas en CDMX

Ciudad de México.- Más de 500 familias que dependen de las rutas 12, 84 y 9 del transporte público en la Ciudad de México realizaron una manifestación para apelar al criterio y humanidad de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum. Los transportistas cerraron las vialidades al sur de la ciudad para denunciar que la Secretaría de Movilidad pretende quitarles sus espacios de trabajo para sustituirlos por una empresa ajena a la zona.

Los concesionarios y sus familias bloquearon las avenidas Canal Nacional y Calzada de las Bombas, en ejercicio del derecho humano a la libertad de expresión y de ideas. Denunciaron que el secretario de Movilidad, Andrés Lajous, y el subsecretario de Movilidad, Luis Ruiz, anunciaron la extinción de dichas rutas para entregar los recorridos a una nueva empresa ajena a la zona, pero donde trabajó uno de los funcionarios.

Los transportistas expusieron que la empresa Autobuses Barrios de Culhuacán, ajena a ese servicio, obtuvo la mayoría de la operación por favorecimiento del titular de la Semovi y del subsecretario, ya que este último trabajó allí. Los manifestantes llevaron a cabo la movilización y los bloqueos para exponer a la jefa de gobierno los abusos de sus funcionarios y los problemas que generaron al desplazarse de su fuente de trabajo, en la que estuvieron por 38 años.

El líder de transportistas, Ignacio Hernández, pidió a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, que los escuche, confiando en que ella pueda ayudar a resolver la situación. Además, solicitó que las protestas no sean criminalizadas ni tomadas como un desacato a la autoridad, sino por el contrario, que sean tomados en cuenta y su trabajo sea respetado.

Los concesionarios de transporte colectivo que actualmente prestan los servicios en los recorridos mencionados, sean o no integrados al nuevo Servicio Zonal, se sujetarán a los procedimientos administrativos correspondientes para su extinción. Mientras tanto, las familias de los transportistas esperan que sus empleos sean protegidos y que se les permita seguir trabajando en las rutas que han servido a la comunidad durante tantos años.