Urge Morena crear una ley de control de ruido en CDMX
Redacción
Ciudad de México.- La Ciudad de México es considerada la octava urbe más ruidosa del mundo y ostenta el primer lugar en Latinoamérica, registrando un promedio de más de 100 decibeles (dB), según un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Ante esta problemática, los diputados locales de Morena, Leonor Gómez Otegui y Paulo Emilio García González, urgieron la creación de la Ley de Control de Ruido de la Ciudad de México. Los legisladores buscan que se reconozca el exceso de ruido como "una amenaza que atenta contra el bienestar, la salud y el medio ambiente", y así garantizar el derecho a un medio ambiente libre de contaminación acústica.
Para justificar su planteamiento, se basan en expertos en planeación urbana y acústica, quienes indican que las principales fuentes de contaminación de esta índole provienen del tránsito vehicular, el transporte público, la música y los altavoces de establecimientos mercantiles (como bares, restaurantes y salones de fiestas), además de concentraciones y eventos masivos.
Estos mismos especialistas sostienen que la exposición prolongada a altos índices de sonidos estridentes puede generar graves consecuencias, sobre las cuales la ONU alerta al mundo en el sentido de que ello puede interrumpir las horas de sueño hasta, potencialmente, ocasionar la muerte.
Mientras que a nivel de salud, la falta de regulación puede causar:
• Aumento de la presión arterial y riesgo de enfermedades cardiovasculares.
• Deterioro del rendimiento escolar y laboral, y de la concentración.
• Estrés crónico, fatiga y trastorno del sueño.
• Pérdida progresiva de la capacidad auditiva
LA POBLACIÓN VULNERABLE
Según los estudiosos del tema, esta contaminación afecta mayormente a las personas más jóvenes, adultos mayores y a las comunidades en situación de vulnerabilidad que habitan cerca de zonas industriales y de mucho tránsito.
Por ello, la propuesta legislativa que se presentó semanas atrás ante el Congreso capitalino, tras siete meses de análisis, expone lo siguiente:
• Establecer un límite máximo de 62 a 65 decibeles.
• Sancionar a quienes incumplan la norma, abarcando establecimientos mercantiles, automóviles, mercados, tianguis y obras públicas y privadas.
Con base en los diputados morenistas, vecinos de la capital del país subrayan específicamente que el ruido de las construcciones es muy molesto y excede ciertas horas de la noche, afectando su descanso y sana convivencia.
Incluso destacaron que la alcaldía Cuauhtémoc ocupa el primer lugar en el número de quejas interpuestas debido al exceso de ruido en la Ciudad de México.
ACCIONES INTERNACIONALES
Como referencia internacional, se mencionó que ciudades como Tokio pusieron en operación su “Ley de Control del Ruido” en 1968, una normativa que marca diferentes límites, siendo 55 decibeles el máximo permitido durante el día y 45 decibeles por la noche.
Para garantizar el cumplimiento de la potencial normativa, proyectan la participación de la Secretaría del Medio Ambiente local (Sedema), la Secretaría de Salud citadina (Sedesa), la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), y la Secretaría de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana.
Dicha iniciativa, compuesta por 30 artículos, fue enviada a las comisiones unidas de Preservación de Medio Ambiente, Cambio Climático, Protección Ecológica y la de Administración Pública Local para su análisis.
IMCM