MONTERREY.- Rayados y Cruz Azul se enfrentan en la final de la Copa MX con la misión de llevar un trofeo más a sus vitrinas, en un duelo en el que ambos equipos buscan dejar atrás su respectiva mala fama.
Aunque Monterrey se coronó en su estadio en el torneo copero del Apertura 2017 al vencer 1-0 a Pachuca, tiene el peso de las dos finales de liga perdidas en el BBVA Bancomer, donde primero cayó ante los Tuzos y el año pasado perdió el título en contra de Tigres.
Por el lado de La Máquina, los 21 años que tiene sin coronarse en la Liga MX, han provocado que sean la burla del futbol mexicano, porque han perdido cinco finales y la última cuando tenían el título en las manos y América se los arrebató.
Las únicas alegrías que Cruz Azul le ha dado a sus aficionados fueron los títulos de la Copa MX en el Clausura 2013 y un año después, el de la Concachampions, que le permitió a los celestes clasificar al Mundial de Clubes.
Los dirigidos por Pedro Caixinha han mostrado un buen nivel en el torneo y sueñan con el doblete para terminar con la sequía de títulos, y la primera aduana será imponerse en la cancha de Rayados.
La mala noticia para Cruz Azul es que el estadio Azteca ha sido su principal aliado y han fallado en sus últimos partidos de visita, lo que le da un punto a favor a Rayados, que tendrá el apoyo de su apasionada afición.
La escuadra cementera vive una semana crucial, porque después de la final copera, visitará a Pumas, un rival que tiene un punto menos en la tabla y que saldrá a cazar el tercer lugar de La Máquina.
En la salida de Cruz Azul rumbo a Monterrey, Julio César Domínguez pidió a los seguidores celestes que se ilusionen, porque se entregarán al máximo para traerles la copa.
“Muy contento de estar en otra Final, por todo el trabajo que hemos hecho. Estamos muy ilusionados, creo que la gente siempre está con nosotros. Tenemos el mismo objetivo y esperemos que se consiga”, afirmó el ‘Cata’.
JLR
