Migrantes temen arrestos por perfil racial por nueva legislación en Florida

EFE

Miami.- Varias organizaciones de inmigrantes expresaron este jueves su preocupación por la reciente expansión en Florida, Estados Unidos, de un programa para la reubicación de indocumentados que puede dar pie a detenciones motivadas por el perfil racial en este estado y el resto del país.

La ley SB 6B, que, tras su aprobación en el Legislativo floridano, fue firmada ayer por su promotor, el gobernador Ron DeSantis, permite el traslado de inmigrantes que no necesariamente estén en Florida a otras partes del país, como ocurrió en septiembre pasado cuando el mandatario envió a casi 50 indocumentados desde Texas hasta Massachusetts.

El texto firmado por DeSantis, que fue aprobado el pasado viernes por la Legislatura estatal durante una sesión especial, establece un fondo de 10 millones de dólares e incluye categorías que, según activistas, no existen en el marco legal migratorio, como es el caso de "extranjeros no autorizados inspeccionados", una categoría que podría abarcar a muchas personas.

"No hay una definición real de esa categoría y suscita dudas sobre la posible aplicación de perfil racial en todo Estados Unidos", dijo hoy durante una teleconferencia la abogada Shalyn Fluharty, directora ejecutiva de la organización Americans for Immigrant Justice.

De acuerdo con Fluharty, la norma suscita un conflicto directo con leyes federales de inmigración y puede suponer una atribución excesiva de Florida respecto a otras leyes estatales en esa materia.

Para la directora ejecutiva de la Coalición de Inmigrantes de Florida, Tessa Petit, la ley permitirá a la División de Manejo de Emergencias de Florida (DEM, en inglés) y a las fuerzas de seguridad estatales "cazar y apuntar a inmigrantes en cualquier lugar de Estados Unidos", sin importar sin son menores o familias.

Sobre la posible extrapolación de esta norma a otros estados, Petit señaló que eso dependerá del grado de bienvenida que éstos tengan hacia los inmigrantes.

"Este programa de transporte de extranjeros es cruel e inhumano, y abre la puerta al uso de perfiles raciales", dijo, por su parte, Luis Sousa-Lazaballet, de la organización Hope CommUnity Center, pidió a la comunidad hispana de EU no caer en "la trampa de la división".

"Hay que mantenernos unidos, todos tenemos derecho a perseguir el sueño americano y nuestra libertad", aseveró, tras resaltar que organizaciones como la que representa conocen de primera mano "los impactos de las políticas que crean miedo en la comunidad inmigrante".

Paul Namphy, de Family Action Network Movement (FANM), y el monseñor J. Fritz Bazin, del arquidiócesis episcopal de Little Haití, en Miami, expresaron también su preocupación por el efecto de esta nueva normativa entre los haitianos, cubanos y centroamericanos que continuarán llegando a Florida, y prometieron dar la batalla legal.

"Eres bienvenido aquí en Florida y tienes derecho a estar aquí", dijo Namphy, dirigiéndose a los futuros solicitantes de asilo durante la teleconferencia organizada por la campaña "Welcome With Dignity".

Esta nueva ley ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones proinmigrantes y del Partido Demócrata estatal, que la han calificado de "juego político" y parte de una estrategia de DeSantis para apuntalar su figura a nivel nacional entre los republicanos con miras a una posible aspiración presidencial.

El programa tiene su antecedente en el traslado aéreo en septiembre pasado de medio centenar de inmigrantes, la mayoría venezolanos que habían cruzado desde México para solicitar asilo en EU, desde San Antonio, Texas, hasta Martha's Vineyard, Massachusetts, a bordo de un avión fletado por la Administración de DeSantis.

Aquel trayecto generó una gran polémica y demandas judiciales contra DeSantis y Florida, pues los inmigrantes no estaban en ese territorio y, además, presuntamente fueron inducidos a abordar el vuelo con promesas engañosas.