¡OFICIALISMO TOTAL!: Congreso de El Salvador aprueba reelección presidencial indefinida

Por Oscar Odín Gil Saldívar
San Salvador. – La noche del pasado 29 de julio de 2025, la Asamblea Legislativa de El Salvador, oficialista en su mayoría, aprobó una reforma que consiste en legalizar la reelección presidencial de manera indefinida, así como extender el periodo de gobierno de cinco a seis años.
Se trata de una drástica reforma constitucional, la cual fue elaborada y propuesta por el Partido Nuevas Ideas, el cual es afín al actual presidente de El Salvador, Nayib Bukele. La proposición se presentó un día antes de comenzar un pequeño periodo de vacaciones, por festividades que tenían lugar en la capital salvadoreña.
Dicha reforma, además de permitir la reelección “sin reservas”, modifica los artículos 75, 80, 133, 152 y 154 de la Constitución Salvadoreña, que alarga el periodo de gobierno, pone en sincronía las alecciones presidenciales con las legislativas y municipales y elimina la segunda vuelta electoral, por otra parte, la iniciativa acorta el actual mandato de Bukele, finalizando en 2027, cuando debía de terminar en 2029, con el objetivo de celebrar comicios presidenciales con diputados y alcaldes.

Con el apoyo de 57 de los 60 parlamentarios del congreso, los cuales pertenecen a Nuevas Ideas, la reforma fue aprobada, provocando críticas por parte de miembros de la asamblea, opositores al régimen bukelista, integrantes de los partidos Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y Vamos.
“La situación de esta noche es tan grave que ustedes no se dan cuenta lo que trae una relección indefinida. Trae acumulación de poder y debilita la democracia.”, sentenció Marcela Villatoro, diputada de Arena.
Por otra parte, diputados y diputadas adeptos al gobierno actual, vitorearon la reforma, asegurando que correspondía a otorgarle poder al pueblo.
"Esto es bastante simple, pueblo salvadoreño. Solamente ustedes van a poder decidir hasta cuándo apoyan a su presidente", declaró Ana Figueroa, diputada oficialista de Nuevas Ideas.

Bukele inició su segundo periodo presidencial consecutivo en junio de 2024, a pesar de que varios artículos de la constitución lo prohibían, después de un cambio de opinión de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema, que fue nombrada por la Primera Legislatura, conformada por miembros de Nuevas Ideas, en un proceso cuestionable.
En febrero de ese mismo año, en una entrevista, le preguntaron al presidente si él consideraba necesaria una reforma para la reelección indefinida, a lo que él contestó: "Creo que no es necesaria la reforma constitucional".
A inicios del pasado junio del presente año, Bukele expresó: “Me tiene sin cuidado que me llamen dictador”.
Si bien, el tema es complejo, expertos como Mario Alejandro Torrico Terán (Miembro de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales) y Agustín Grijalva Jiménez (Académico de la Universidad Andina Simón Bolívar), señalan los matices de tomar este tipo de decisiones desde un gobierno, que son posibles gracias a la fuerza y legitimidad que tenga en su nación una administración federal, señalando casos como los de Nicaragua, Bolivia, Ecuador, Cuba y Venezuela, además de poner énfasis en el trato mediático que se le da desde afuera a políticas que tiene injerencia en las democracias nacionales, en este caso, Nayib Bukele tiene una alianza con Donald Trump, por lo que no se ha visto ninguna condena o amenaza hacia El Salvador, por atentar contra la democracia y los derechos humanos, como si ha sido el caso de países como los antes mencionados, que encabezan gobiernos nacional populares de izquierda.

