Redacción deportes, 11 ago (EFE).- La FIFA confirmó este martes al finlandés Olli Rehn como presidente de la Comisión de Dirección del Plan de Apoyo COVID-19, según informó a través de un comunicado oficial en el que el nuevo dirigente afirmó que confía en "minimizar" los daños que la pandemia ha causado en el futbol.
Rehn cuenta con una larga trayectoria en Finlandia y en la Unión Europea centrada en políticas económicas y gubernamentales y en la actualidad ocupa el cargo de gobernador del Banco de Finlandia y es miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo.
Además, fue vicepresidente de la Comisión Europea y desde 2017 es vicepresidente independiente de la Comisión de Gobernanza de la FIFA. Como miembro de esa comisión, Rehn, informó la FIFA, ha seguido de cerca las reformas implementadas por el organismo presidido por Gianni Infantino en los últimos años.
En su discurso ante el Congreso de la Asociación de Futbol de Finlandia, Rehn expuso la respuesta de la FIFA a la pandemia y destacó las reformas implementadas por la organización en el ámbito de la gestión financiera, la ética y el buen gobierno.
"La FIFA ha avanzado mucho desde la grave crisis de corrupción que atravesó en 2015 y que fue la culminación de años o probablemente décadas de problemas. En los últimos años, bajo el liderazgo del presidente Gianni Infantino, la principal prioridad de la FIFA ha sido reformar la federación de acuerdo a normas éticas sostenibles y medidas de buena gobernanza", explició Rehn.
También añadió que los sistemas de inspección y control de los fondos para el desarrollo del futbol "han mejorado" hasta alcanzar un nivel adecuado y profesional. A su juicio, eso puede suponer una mayor carga administrativa para las federaciones miembro, "pero resulta esencial" para garantizar que los fondos se destinan "al propósito para el que han sido concedidos".
Asimismo, resumió la gestión de la FIFA en la crisis generada por el coronavirus y dijo que la principal prioridad de la organización presidida por Infantino "ha sido la salud" y apuntó como "buen indicador" que al inicio de la primavera, todas menos 4 de las 211 federaciones miembro, se dejó de jugar al futbol.
"Como gesto de solidaridad, la FIFA adoptó medidas para paliar las consecuencias sufridas por las federaciones, los clubes y otros actores del mundo del futbol. Como resultado de las importantes reformas económicas y administrativas llevadas a cabo por la FIFA, la Federación Internacional goza de una situación económica firme, gracias a la cual podrá contribuir a que nuestro deporte se recupere de la crisis del coronavirus", añadió.
Sobre el trabajo del Plan de Apoyo de la FIFA COVID-19, ofreció algunos datos y explicó que durante la primavera y el verano se destinarán en total 1.500 millones de dólares para respaldar a la comunidad futbolística global.
"Como miembro de la Comisión de Gobernanza de la FIFA, he participado personalmente en la creación de este plan. El sistema de ayudas es similar al de la Unión Europa en cuanto a que se financia gracias a las reservas y a la gran solvencia de la institución y se materializará a través de ayudas directas y préstamos, que podrán solicitar las federaciones miembro de manera facultativa".
Por último, culminó su discurso con un mensaje de "esperanza" e indicó que la nueva Comisión de Dirección continuará supervisando la puesta en marcha del citado plan, así como su gestión económica, eficacia e implementación en todo el mundo.
