TORREÓN – En el momento justo, cuando tenían que afilar las garras, los Pumas derrotaron 2-1 al Santos, le quitaron el invicto en Torreón y de paso se metieron a los puestos de Liguilla, son sextos generales y tienen el destino en sus manos cuando en la última jornada reciban al Querétaro.
El cuadro universitario sorprendió a los Guerreros al salir a proponer el juego, a tal grado que se fue al frente apenas al 4’ cuando Marcelo Díaz anotó de tiro libre, con un balón que superó la barrera y se incrustó en el ángulo inferior derecho.
Los verdiblancos no atinaron a reaccionar y los universitarios los tomaron en contragolpe orquestado por Matías Alustiza, quien puso un pase a profundidad para que Nicolás Castillo le ganara en la carrera en la zaga para definir cruzado y a segundo poste ante la salida de Jonathan Orozco.
Los Guerreros reaccionaron heridos a través de su aparato ofensivo a través de Jesús Isijara, Osvaldo Martínez, Brian Lozano, Djaniny Tavares, Julio Furch y Jonathan Rodríguez, pero fue entonces cuando la figura de Alfredo Saldívar se acrecentó a través de atajadas espectaculares, sobre la línea, cuando ya se coreaban.
Fue hasta que Carlos Izquierdoz al 77’ tomara un rebote en un tiro de esquina como santos pudo recortar el marcador, lo siguió intentando, fue al frente, asfixió a unos Pumas que se replegaron, defendieron como pudieron y terminaron consiguiendo unos tres puntos que los ponen en el mapa, los devuelven a la Liguilla y pone el destino en sus manos.
