Rebozos de bolita se convierten en cubrebocas

Calimaya, Méx.- El Estado de México tiene una amplia diversidad de artesanías que fortalecen el espíritu mexiquense, tal es el caso de los rebozos de bolita, prenda fabricada tradicionalmente en los municipios de Tenancingo y Calimaya, donde las técnicas ancestrales en su elaboración se adaptan para transformarlo en cubrebocas y ser una alternativa original para mantener los cuidados de la salud en la pandemia por COVID-19.

Como parte de un legado familiar, el entintado de los hilos y el anudado nació en La Rebocería, un lugar en Calimaya donde se hacen y comercializan estas piezas, consideradas por algunos como una obra de arte.

“Con motivo de la emergencia de la pandemia de coronavirus, veníamos de una temporada sin ventas, de ahí varios clientes, familiares y amigos nos dieron la idea de hacer algo para esta situación y empezamos a investigar sobre los materiales que podía llevar un cubrebocas, sobre los elementos de seguridad, las capas que debería de tener y ahí fue cuando empezaron los diseños y empezamos a investigar”, explicó Jesús Fuentes Enríquez, artesano al frente de La Rebocería y pionero de la idea de adaptar el rebozo a la confección de cubrebocas.

 Ante la disminución de ventas debido a la contingencia sanitaria, Fuentes Enríquez externó que desde hace tres meses el proyecto de creación de cubrebocas, con los lienzos de rebozo, genera ingresos para más de 30 personas y sus familias.

“Es una satisfacción que tengamos o podamos ayudar a la gente para protegerse, nuestro cubrebocas está elaborado con tres capas, dos de ellas son rebozo y entre ellas una capa de pellón grado quirúrgico de 45 gramos con lo que cumple los estándares y, bueno, es muy bonito que se lleven un cachito de nuestro trabajo, de la tradición, que se esté usando y que la gente lo aprecie.