Alan Robinson y Walter Mcfarlane habían cultivado una relación amistosa desde hace 60 años.
Nacidos en Hawaii con 15 meses de diferencia, se conocieron cuando cursaban el sexto año de primaria.
Robinson era adoptado, y Walter nunca conoció a su padre, por lo que ambos decidieron investigar un poco más sobre su origen.
Luego de un arduo proceso de búsqueda entre árboles genealógicos, sitios de Internet de ADN y redes sociales, encontraron algo que los dejó realmente sorprendidos:
Un usuario de la red de ADN tenía el cromosoma X idéntico al de ellos, después, se dieron cuenta de que habían nacido del mismo vientre.
"Así que después comenzamos a adentrarnos en todas las coincidencias que obtenía", señaló la hija de Macfarlane en declaraciones para Honolulu KHON TV.
Luego de dar con la verdad, compartieron su historia con amigos y familiares durante una cena el pasado fin de semana.
"Fue una experiencia sobrecogedora, lo sigue siendo" expresó uno de los hermanos.
