Giro en el caso Emanuela Orlandi: Investigan a una amiga de la infancia
El misterio de Emanuela Orlandi, la joven de 15 años desaparecida en el corazón del Vaticano hace más de cuatro décadas, ha dado un paso inesperado. Las autoridades italianas han puesto bajo investigación a Laura Casagrande, amiga de la infancia y excompañera de la escuela de música de Orlandi, bajo la sospecha de haber mentido o sido deliberadamente reticente en sus recientes testimonios ante los fiscales.
Contradicciones en el banquillo
Casagrande, quien hoy tiene 57 años, fue una de las primeras personas en declarar cuando la investigación se reabrió formalmente en 2023. Sin embargo, su testimonio ha sido calificado por la fiscalía como “muy contradictorio”.
De acuerdo con Andrea De Priamo, presidente de la comisión bicameral que sigue el caso, la actitud de la testigo sugiere que “quiere retirarse de la escena”, mostrando lagunas de memoria que han despertado las alarmas de los investigadores. Aunque Casagrande se disculpó por sus olvidos, las autoridades sospechan que podría estar ocultando información crucial.
El rastro de 1983: ¿Encubrimiento o miedo?
En sus declaraciones iniciales, Casagrande recordó vagamente una llamada telefónica recibida días después de la desaparición en la que se exigía la liberación de Mehmet Ali Agca, el hombre que disparó contra el Papa Juan Pablo II en 1981. Esta pista conecta con una de las teorías más persistentes: que Emanuela fue utilizada como moneda de cambio política.
Laura Sgrò, abogada de la familia Orlandi, cuestionó abiertamente la actitud de la investigada: “Se nota que está siendo reticente. ¿Está encubriendo a alguien? ¿Por qué hay tanto miedo después de tantos años?”.
La esperanza de la familia Orlandi
Para Pietro Orlandi, hermano de la joven desaparecida y quien ha dedicado su vida a buscar la verdad, este nuevo interrogatorio es una señal de progreso. “Es una noticia importante. Significa que la fiscalía está trabajando con total seriedad y de forma confidencial”, declaró a medios italianos.
Un rompecabezas de cuatro décadas
Emanuela Orlandi desapareció el 22 de junio de 1983 tras salir de una clase de flauta. Desde entonces, el caso ha alimentado teorías que involucran desde la mafia romana (Banda della Magliana) y complots del KGB, hasta una supuesta red de albergues en Londres financiada por el Vaticano.
Actualmente, los Carabinieri de Roma y magistrados vaticanos colaboran estrechamente revisando documentos de archivo y reconstruyendo los últimos movimientos de la joven. Tras el éxito del documental de Netflix "La chica del Vaticano", la presión pública y judicial ha llevado a un examen minucioso de pruebas que el fiscal jefe del Vaticano, Alessandro Diddi, calificó previamente como "dignas de más investigación".
El interrogatorio de Casagrande representa un intento por romper el muro de silencio que ha protegido uno de los mayores enigmas de la Santa Sede por más de 40 años.
