Poliamor: Almohada para tres, en versión mexicana

Por Carlos Meraz

Un triángulo amoroso no es, swingers tampoco y mucho menos adúlteros o musulmanes, son poliamorosos, y esa modalidad de relación íntima de una triareja mexicana será llevada al cine, en una película de manufactura española con inversionistas británicos.

El polígamo trío en el que se fincará la trama está basado en la realidad de un matrimonio heterosexual que, de manera consensuada, decidió incluir a una tercera mujer en su entorno íntimo y cotidiano. Él es un empresario de 42 años, originario de Monterrey, cuyo nombre real es Rodrigo Contreras —conocido por ser el dueño de la patente de la cerveza mexicana Duff, en alusión a la famosa bebida de cebada favorita de Homero Simpson en la serie animada Los Simpson—, la esposa es Melin Velasco, una nutrióloga tapatía con 32 primaveras y la novia-prometida es Lina Morales, una guanajuatense de 21 años.

Su peculiar estilo de vida open mind no es propiamente la de un harem de jeque árabe sino se resume, en el título de la película ochentera Almohada para tres y en su slogan cinematográfico podría sentenciar: “es tan grande su amor que necesitaban compartirlo”, como lo reconoce Contreras, quien tiene su hogar con dos mujeres en la ciudad española de Almería, donde la funcional tercia sentimental no ha pasado desapercibida ni en la provincia andaluza como tampoco en otras latitudes de Europa.

“La idea inicial era hacer un cortometraje documental para romper con los estereotipos de promiscuidad del poliamor, mientras profundizamos en los lazos sentimentales y de compromisos que se forjan, pues no sólo es sexo. A un medio español le gustó que somos como cualquier relación abierta, no nos escondemos ni lo ocultamos a nuestras familias.

“Derrumbamos mitos de la media naranja, que los celos son un gesto de amor o de la exclusividad o pertenencia del ser amado. Eso les gustó aún más y nos propusieron mejor hacer una película, dirigida por un director español con bastante reputación. Sólo les pedí que hubiera talento mexicano y queremos que la música de la cinta sea de Aleks Syntek”, afirmó.

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Contreras relató que tras seis años de matrimonio con Melin le confesó que era poliamoroso y ella aceptó que vivieran juntos con Lucy, una chica de 18 años que fue parte de su vida y luego optó por hacer su vida independiente, y hace tres meses conocieron a Lina para continuar con su modalidad de relación simultánea basada en la “honestidad brutal”.

“Antes de casarme con Melin tuve otro matrimonio convencional en el que tuve un hijo y decidí hacerme la vasectomía. Así que en nuestra familia de tres no hay planes de hijos, pero sí quiero casarme legalmente también con Lina y una boda de una triareja sólo está instituida en Brasil y no descartamos viajar allá para concretarla”, advirtió.

Actualmente, Contreras se alejó de la industria cervecera y sólo mantiene la marca Duff para rentarla, pues se dedica a la escultura y a la inversión en criptomonedas.

“Para ser poliamoroso se requiere de un corazón tan grande como tu bolsillo. El dinero siempre ayuda para poder ofrecerle a las dos un estilo de vida holgada y con tiempo juntos. No somos unos degenerados, simplemente los tiempos cambian...”, concluyó Contreras.