Por Moris Beracha
Invertir en el mundo cripto es un comportamiento habitual en el ámbito empresarial, una tendencia muy marcada sobre todo durante el año pasado por gigantes como Tesla o MicroStrategy. Esta última firma informó en agosto de 2021 que había comprado 21.000 bitcoins por 250 millones y que adoptó ese criptoactivo, el más famoso del mundo, como su principal activo de reserva.
Pero no han sido solo estas dos corporaciones las que han mostrado gran interés en el Bitcoin, cada vez son más los inversionistas institucionales que se suman a este mercado.
Incluso, en momentos donde el Bitcoin y las demás monedas virtuales transitan un período de alta volatilidad, la tendencia sigue firme y, de hecho, crece exponencialmente. Según un informe de CoinShares, reseñado por el portal IProup, las empresas invirtieron aproximadamente 300 millones de dólares en fondos de Bitcoin en las últimas semanas, lo que representa un récord en lo que va de año.
Es más, el Bitcoin aparece como el principal activo adquirido, con entradas que sumaron 299 millones de dólares en dicho periodo, lo que sugiere que los inversionitas acudieron a la relativa seguridad del mayor activo digital.
Desglosado en términos demográficos, vemos que los inversionistas estadounidenses inyectaron fondos cripto por 312 millones de dólares la semana posterior a la caída de Bitcoin a los 30.000 dólares. Mientras, los inversionistas europeos reflejaron una salida neta de apenas 38 millones de dólares, según CoinShares.
Pero lo cierto es que en el "marzo negro" de 2020, cuando se llegó a cotizaciones mínimas fruto del desconcierto por la pandemia, la participación de los grandes inversionistas creció 27%.
Además, se calcula que actualmente existen 2.160 compañías que atesoran más de 1.000 bitcoins, lo que demuestra que los compradores de este tipo se sumaron a esta alternativa de inversión.
Miguel Schweizer, cofundador de Quantia Capital, empresa de gestión de activos digitales, refuerza este planteamiento al asegurar que ha aumentado la cantidad de inversionistas en bitcoins, tal como lo demuestran las métricas que manejan. Y concluye que si bien fueron las personas físicas quienes concentraron al comienzo gran cantidad de activos, actualmente lo hacen los fondos, empresas e instituciones.
Tanto es así que se creó toda una terminología animal para designar a los inversionistas y esto incluye desde los grandes jugadores que desembarcan con importantes sumas hasta los más pequeños.
Esta clasificación abarca Camarones, que poseen menos de un Bitcoin; Cangrejo, entre 1 y 10 bitcoins; Pulpo, entre 10 y 50; Pescado; entre 50 y 100; Delfín, entre 100 y 500; Tiburón, entre 500 y mil; Ballena, entre mil y 5 mil y Ballena Jorobada, con más de 5 mil bitcoins
Ahora, más allá de esta categorización, lo cierto es que los inversionistas institucionales están a la caza del Bitcoin y con toda razón. Sigue siendo un activo seguro.
