Por Moris Beracha
El cofundador de PayPal y defensor del Bitcoin, Peter Thiel, no titubeó al momento de exponer a los tres principales "enemigos" de ese criptoactivo. Durante su intervención en la conferencia Bitcoin 2022, que se realizó en abril en Miami, Florida, dirigió sus críticas principalmente al inversionista y empresario estadounidense Warren Buffett, director general de Berkshire Hathaway, a quien calificó de "enemigo número uno" del llamado “oro negro”.
En su lista también están el presidente de JP Morgan, Jamie Dimon, y el presidente de BlackRock, Larry Fink. A los tres Thiel los acusa de permitir que el sistema financiero “albergue sesgos institucionales y políticos” contra el Bitcoin. Y a las pruebas se remitió. Mientras Buffett en reiteradas oportunidades ha asegurado que el criptoactivo es un "veneno para ratas"; Dimon lo ha calificado de "fraude" y "sin valor".
Por otro lado, también criticó a las empresas ESG -siglas en ingles de ambiental, social y gobernanza- pues, a su juicio, se transforman en una “fábrica de odio” cuando se trata del Bitcoin.
Para Thiel, oponerse al Bitcoin está bien; sin embargo, emprender acciones para dañarlo debe ser considerado como un atentado contra la vida financiera y la estabilidad de las nuevas generaciones. En ese sentido, considera que las personas que hacen lo posible por destruir a ese criptoactivo son unos “villanos”.
De tener éxito, aseguró, estarían destruyendo la capacidad de generar riqueza de una generación que está perfectamente acoplada a las nuevas tecnologías; al tiempo que podría comprometer el desarrollo tecnológico. Por eso, lanzó esta advertencia: “Hay que luchar contra los adversarios de Bitcoin”.
Thiel está convencido de que "los bancos centrales están en bancarrota" y que, en la actualidad "nos encontramos al final del régimen del dinero fiduciario”, por lo que considera que el Bitcoin -el cual catalogó como una moneda de “alto valor y baja velocidad”- es la última alternativa a todo el sistema financiero tradicional.
Es más, manifestó que el Bitcoin representa el mercado más honesto del mundo, ya que es controlado por sus propios seguidores y no por entes centralizados. Así que este criptoactivo, según expuso, no es responsable de la “inminente caída” del sistema fiat y de la quiebra del modelo basado en los bancos centrales.
Realmente el Bitcoin es un salvavidas frente a ello, por lo que hay que ponerle un freno no solo a sus tres principales “enemigos”, sino a todos aquellos que quieran dañar el criptoactivo y, en consecuencia, al mercado.
