¡Alerta global! Virus potencialmente mortal se propaga en África, Oriente Medio y Europa

Gran Bretaña.- En los últimos días, ha surgido una creciente preocupación por la propagación de un virus potencialmente mortal en varias regiones del mundo. Países de África, Oriente Medio e incluso Europa han comenzado a registrar casos de infección. La enfermedad, conocida como fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (FHCC), ha provocado brotes en Irak y Namibia, mientras que en Pakistán ya se han reportado dos defunciones.

Un informe presentado ante el Comité de Ciencia, Innovación y Tecnología del Parlamento británico ha advertido que es "altamente probable" que el virus se extienda también al Reino Unido. El Dr. James Wood, director de la facultad de medicina veterinaria de la Universidad de Cambridge, declaró que es probable que las infecciones transmitidas por garrapatas, incluyendo la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, se propaguen en algún momento al Reino Unido a través de sus vectores.

La FHCC es una enfermedad causada por un virus del género Nairovirus, que se transmite principalmente por garrapatas y puede tener una tasa de mortalidad de entre el 10% y el 40%. Aunque la enfermedad está presente en ciertas regiones de África, los Balcanes, Oriente Medio y Asia, su incidencia solía ser baja.

Sin embargo, los efectos del cambio climático están provocando que la enfermedad se extienda más allá de sus territorios habituales, alcanzando países como el Reino Unido y Francia. En Gran Bretaña se han identificado tres casos de la infección desde 2012, aunque se ha confirmado que todos los afectados adquirieron el virus durante viajes al extranjero.

El cambio climático, con sus veranos más largos y áridos, ha permitido que las garrapatas se dispersen por toda Europa, según el Dr. Ali Mirazimi, virólogo del Instituto Karolinska de Suecia.

La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo es una de las nueve "enfermedades prioritarias" clasificadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como las mayores amenazas para la salud pública debido a su potencial epidémico. Además de las garrapatas, el virus también puede transmitirse a través del contacto con la sangre o los fluidos corporales de una persona infectada.

Los síntomas de la enfermedad incluyen dolor de cabeza, fiebre alta, dolor en las articulaciones y el abdomen, vómitos y, en casos graves, ictericia, trastornos del estado de ánimo, trastornos sensoriales y hemorragias abundantes.

Durante el año pasado, Irak experimentó un brote de la enfermedad con un total de 212 casos de infección y 27 fallecimientos registrados entre enero y mayo de 2022. En mayo de este año, se informó de 100 casos adicionales y al menos 13 defunciones en Irak. Pakistán también ha sido afectado recientemente, con 16 casos y varias muertes en la provincia de Baluchistán.

A medida que las enfermedades virales se expanden más allá de sus fronteras habituales, se hace evidente la necesidad de tomar medidas preventivas y estar atentos a la propagación de enfermedades como el dengue, el zika y la fiebre del Valle del Rift (FVR), que también son transmitidas por mosquitos. Los expertos advierten sobre la posibilidad de que estos patógenos se establezcan en el Reino Unido y otras regiones afectadas por el cambio climático.