Video | Israel bombardea la iglesia cristiana más antigua de Gaza; se reportan varios muertos

En un nuevo episodio de violencia en la Franja de Gaza, el ejército de Israel habría bombardeado la iglesia de San Porfirio, reconocida como el recinto religioso cristiano más antiguo de toda la región.

Gaza, hogar de musulmanes y cristianos, poco a poco se convierte en un páramo en ruinas, debido a los constantes ataques con bombas y misiles a infraestructura civil por parte de Israel. Escuelas, hospitales, edificios de departamentos, parece no haber distinción para las fuerzas armadas israelíes, las cuales, aseguran, solo atacan al grupo extremista Hamás.

Ahora, un complejo adyacente a la iglesia cristiana más antigua de toda la Franja de Gaza, habría sido blanco de un ataque aéreo. Esta construcción daba refugio a los desplazados palestinos en una de las ofensivas más graves desde la Guerra del Yom Kipur, ocurrida hace casi 50 años.

La iglesia de San Porfirio, cuya antigüedad se estima en alrededor de 1600 años, pertenece a la Iglesia Ortodoxa Griega. A lo largo de los años, este edificio cristiano ha servido como refugio a las víctimas de los constantes ataques israelíes.

El número de víctimas tras esta nueva agresión no es claro, sin embargo, de acuerdo con testimonios de sobrevivientes, así como de un comunicado del Patriarcado Ortodoxo Griego de Jerusalén, se sabe que hay personas atrapadas en los escombros.

El ataque a la iglesia de San Porfirio contrasta con los dichos del ejército israelí, el cual, asegura, solamente tiene como objetivos bases o almacenes pertenecientes a Hamás. 
 

Un crimen de guerra, dice Patriarcado sobre el ataque en sus instalaciones

En su página web, el Patriarcado Ortodoxo de Jerusalén condenó duramente el ataque aéreo

“El Patriarcado enfatiza que atacar iglesias e instituciones, junto con los refugios que las mismas proveen paran proteger a ciudadanos inocentes, especialmente niños y mujeres que han perdido sus hogares debido a los ataques aéreos israelíes en áreas residenciales los pasados trece días, constituye un crimen de guerra que no puede ser ignorado”, se lee en un comunicado.

De la misma manera, el Patriarcado remarcó que no abandonará su “deber religioso y humanitario”, pese a los reiterados ataques “deliberados” por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, por sus siglas en inglés).