El presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que la situación del COVID-19 en su país está “totalmente bajo control”, pese al aumento de contagios, que han escalado hasta los 42 mil 800 casos confirmados en la nación euroasiática.
“Todas las autoridades, en todos los niveles, están trabajando de forma rítmica, en una respuesta responsable y organizada, la situación está bajo control”, indicó el mandatario ruso este domingo, en su mensaje con motivo de la Pascua de la Iglesia ortodoxa.
Agregó que la nación está preparada para todo tipo de escenarios, ya que cuenta con el suficiente abastecimiento de recursos económicos y médicos para paliar la pandemia.
“Sí, todas las medidas en proteger las vidas humanas y su salud, al igual que su economía, requieren una mayor cantidad de recursos y reservas, las cuales tenemos", dijo en el mensaje televisado.
"Estamos usando estas reservas de manera diligente y quirúrgica, para tratar la situación particular y ayudar a todas las familias que están enfrentando una situación desafiante al momento", expresó Putin.
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El mandatario precisó que autoridades de inteligencia de su gabinete se encuentran en el análisis de contramedidas para combatir al nuevo tipo de neumonía en cooperación con las recomendaciones de otros países que han enfrentado de forma exitosa la pandemia, como Corea del Sur o China.
En vísperas de la Pascua expresó que el COVID-19 también será subsanado con la ayuda de Dios, en un mensaje teledirigido a los ortodoxos de la religión católica en el país. “En esta celebración de la resurrección de Jesús Cristo, también quiero agregar que todo estará bien con la ayuda de Dios”, dijo el titular del ejecutivo.
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