Por Carlos Meraz
En tan solo cuatro años de existencia, Sotomayor se ha ganado un lugar preponderante en la música electrónica mexicana como una prestigiosa banda de world music, que ahora con su tercer álbum de estudio, titulado Orígenes, saldrá en busca de su internacionalización en el mercado estadounidense y europeo.
El disco se grabó entre Mexico y Puerto Rico, bajo la producción de Eduardo Cabra, alias Visitante del grupo boricua Calle 13, ganador de 28 estatuillas Grammy.
La producción musical se editará vía Wonderwheel Recordings en febrero próximo con 10 tracks inéditos y desde el 1 de noviembre se liberó su primer single Quema, donde colabora Totín Arará, figura emblemática en la escena de las rumbas, bombas y plenas.
“En Quema el ritmo es chuck-chucka-chuck, la güira, el bajo ascendiente con el teclado que parece estar imitando una alarma.
“Sotomayor es una elegante mezcla de beats electrónicos con ritmos latinos y africanos, y éste es nuestro disco más maduro, es como nuestro diploma, representa un crecimiento enorme, con un sonido distinto y más nítido, es más heterogéneo y plural”, advirtió la vocalista Paulina.
PERCUSIONES Y SINTETIZADORES
La hermana del otro integrante de Sotomayor, el productor Raúl, destacó que Orígenes es el sincretismo musical de lo primitivo con lo tecnológíco en el estudio de grabación.
“Las percusiones son físicas para captar el sonido natural de las bases rítmicas en directo. Que suena a una banda, no a un concepto digital.
“Cada canción tiene su propio universo. Suenan a latino pero voltean para África. Hay un tema que me llega mucho y se titula Ella, que habla de la vulnerabilidad de ser mujer y cómo eso te empodera”, afirmó Paulina.
En Orígenes, Sotomayor explora un sonido fuertemente influenciado por la percusión afrocaribeña y más orientado a la pista de baile.
“Pero siempre hemos estado orientados al género world music más que al dance y lo electrónico”, precisó.
Cuando se lance Orígenes en febrero próximo, Sotomayor tocará en un festival en la CDMX y para abril actuará del otro lado del Atlántico, en Alemania, España y Francia.
