Ciudad de México.- Paseo de la Reforma se llenó de color, disfraces, fiesta y protestas durante una marcha que organizaron pueblos originarios en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas.
Los participantes iban ataviados con trajes típicos de sus regiones de origen y algarabía, aprovecharon el desfile para exigir a las autoridades derechos, respeto y visibilidad de la presencia indígena en la Ciudad de México.
El folklore y tradición tuvo un recorrido del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino con el objetivo de erradicar la discriminación y el racismo contra los integrantes de estas comunidades que residen en la capital del país.
No pudieron faltar los bailables de los participantes que danzaban al ritmo de la música entonada por al menos 10 bandas.
