Tramos elevados de las L4, A y B del Metro serán monitoreados

Ciudad de México.- El Sistema de Transporte Colectivo (STC) ha puesto en marcha un programa de monitoreo de las condiciones físicas de las estructuras elevadas en las líneas 4, A y B del Metro de la Ciudad de México. Estos estudios, que comenzaron este año y se extenderán durante los próximos cinco meses, representaron una inversión de 25 millones 946 mil 341 pesos.
El Metro de la Ciudad de México ha confirmado que este monitoreo tiene como objetivo supervisar y evaluar el comportamiento de las estructuras elevadas. Los trabajos estarán a cargo de tres empresas: Construcciones ICI S.A. de C.V., Ingeniería, Servicios y Sistemas Aplicados S.A. de C.V., y el consorcio IUYET.
El monitoreo geotécnico y la instrumentación sistemática del comportamiento del cajón del Metro en el tramo de Pantitlán a La Paz, así como la construcción de los talleres de La Paz de la Línea A del Metro, están siendo gestionados por la empresa Construcciones ICI. Estas labores comenzaron el 1 de julio y se espera que finalicen el 29 de diciembre de este año.
Por otro lado, la supervisión del comportamiento del tramo elevado de la Línea B del Metro, que va desde Deportivo Oceanía hasta San Lázaro y Morelos, está a cargo de la empresa Ingeniería, Servicios y Sistemas Aplicados, con una inversión de 9 millones 88 mil 255 mil pesos. Según el contrato, esta obra también se completará el 29 de diciembre.
El seguimiento del comportamiento del tramo elevado de la Línea 4 del Metro abarca desde Martín Carrera-Talismán hasta la estación Santa Anita y comenzó el 25 de julio de 2023, con una fecha de finalización prevista para el 29 de diciembre del mismo año.
Estos estudios tienen como objetivo verificar las condiciones físicas de las estructuras elevadas y detectar posibles variaciones, desplazamientos y hundimientos en dichas estructuras. Cabe destacar que, según el Metro, estos trabajos no requieren estudios de impacto ambiental ni de impacto sísmico debido a la naturaleza de la obra y su magnitud.
La implementación de estos programas de monitoreo refleja el compromiso del Metro de la Ciudad de México con la seguridad y el mantenimiento adecuado de sus instalaciones para garantizar la integridad de los usuarios y la eficiencia del servicio.

