Altar de muertos de mil 212 metros cuadrados consigue récord Guinness en Nuevo León

EFE

Monterrey.- Un altar de mil 212 metros cuadrados colocado en la explanada del Museo de Historia Mexicana para conmemorar el Día de Muertos en Nuevo León, consiguió el certificado oficial de récord Guinness, dejando atrás la anterior marca que era de mil 44 metros cuadrados.

“¡Felicidades, Nuevo León! ¡Lo logramos!”, exclamó Lorenia Canavati von Borstel, Presidenta del Patronato del Festival Internacional Santa Lucía (FISL) al recibir el certificado oficial que los reconocía como récord mundial.

La anterior marca, destacó Canavati, estaba en manos de Hidalgo, que en 2019 había conseguido instalar el altar en una superficie de mil 44.30 metros.

El altar presenta una combinación única de elementos tradicionales, como flores de cempasúchil, el perro xoloitzcuintle, sal, calaveras de azúcar, pan de muerto, mezcal y velas, con la tecnología moderna, incluyendo un espectacular show de videomapping proyectado sobre un cráneo gigante, que será visto hasta el 5 de noviembre.

Esta marca, fue parte de las celebraciones de esta tradición mexicana de celebrar a la muerte que inundó las calles de Monterrey, Nuevo León, con el evento “Regios hasta los tuétanos”, un desfile de calaveras y catrinas para conmemorar el 1 y 2 de noviembre.

El evento fue organizado por el FISL, en Monterrey, la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Capillas Funerarias Jardines de Juan Pablo y 3 Museos.

De acuerdo con Protección Civil del estado, 25 mil personas se dieron cita en el lugar para disfrutar del recorrido de estos personajes entre los cuales predominó la presencia de las catrinas.

LEGADO DE JOSÉ GUADALUPE POSADA

La catrina es un personaje creado por el pintor, ilustrador y caricaturista mexicano, José Guadalupe Posada, y que se ha convertido en la figura más representativa de la muerte en el país y uno de los iconos de México en el mundo.

El colorido de los carros alegóricos resultó del agrado de grandes y pequeños que presenciaron el desfile, en donde también se hizo referencia a las celebraciones prehispánicas del Día de Muertos.

Al frente del desfile iba personas con penachos, que ejecutaban danzas al ritmo de sonajas y caracoles, mientras quemaban copal, que es uno de los elementos primordiales de los Altares de Muertos porque existe la creencia de que purifica el ambiente y aleja a los malos espíritus.

Las catrinas vistieron atuendos multicolores y estuvieron adornadas por decenas de flores.

En el desfile participaron más de mil 500 personas en 36 comparsas.

IMCM