Fuerzas armadas y policías llegan a Frontera Comalapa azotada por el crimen organizado

Chiapas.- El despliegue de aproximadamente dos mil efectivos en conjunto de la Guardia Nacional, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de la Policía Estatal de Chiapas y de la Agencia   de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República (FGR) se realizó este martes en el municipio de Frontera Comalapa, en los límites de México y Guatemala, donde desde hace varias semanas se han registrado enfrentamientos armados entre bandas rivales del crimen organizado que buscan quedarse con la plaza en esa región del país.

La llegada de las fuerzas del orden fue recibida a pedradas y con bombas molotov en la comunidad Joaquín Miguel Gutiérrez por lo que los uniformados respondieron con gases lacrimógenos para despejar y tomar la zona.

Y es que desde el pasado 22 de mayo, las confrontaciones entre presuntos miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación con los del Cártel de Sinaloa, comenzaron a subir de tono, en un conflicto que data desde 2021 y en el que han sido utilizados habitantes de las comunidades chiapanecas cercanas como “carne de cañón” de los grupos del crimen organizado.

Ante este panorama, el viernes 27 de mayo, más de un centenar de organizaciones no gubernamentales (ONG) exigieron a los gobiernos municipales, estatales y federales garantizar la seguridad e integridad de la población de varios municipios de Chiapas.

En un comunicado, la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos”, que aglomera a más de 100 organizaciones de la sociedad civil, pidió protección especial para los municipios de Frontera Comalapa, Chicomuselo, Amatenango de la Frontera y La Trinitaria.

Ante el recrudecimiento de la violencia en la zona fronteriza, el colectivo expresó su “preocupación e indignación” y aseguró que “se han denunciado puntualmente las agresiones contra civiles sin tener hasta ahora una respuesta por parte del Estado mexicano”.

Relató que este conflicto por el control territorial entre diferentes grupos del crimen organizado ha traído consecuencias devastadoras como robos, extorsiones, secuestros, desapariciones forzadas, reclutamiento forzado, amenazas de muerte, desplazamiento forzado, feminicidios y asesinatos.

Ante ello, el grupo comentó que los habitantes de estos municipios están abandonando el territorio pues viven con “terror”.

Las ONG detallaron que desde hace dos años se han registrado comunidades enteras incomunicadas por bloqueos de carreteras y caminos, suspensión de clases en las escuelas, cortes de luz eléctrica que incomunican a la población, quema de vehículos, colocación de narcomantas y enfrentamientos armados.

Agregaron que las amenazas de allanamiento de morada para revisión de teléfonos celulares son frecuentes, así como los secuestros, reclutamiento forzado de los hombres de las comunidades para integrarlos a sus filas y muerte a quienes oponen alguna resistencia.

Asimismo, denunciaron la agresión física y el secuestro del defensor Milton Morales Zunun este jueves en el municipio de Chicomuselo, quien fue encontrado con vida varias horas después de haber sido privado de su libertad.

Ante este panorama la red exigió que se garantice la seguridad e integridad física, psicológica y emocional de los habitantes.

Pidieron además protección, justicia y resarcimiento para los defensores del territorio de la Región Frontera de Chiapas.

Finalmente, se sumaron al llamado urgente hecho por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, exigiendo la protección de los defensores de derechos humanos de Chiapas y del resto del país.