Redacción
Ciudad de México.- De un aumento de 2.1% del Producto Interno Bruto (PIB) previsto en septiembre pasado, ahora la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha pronosticado que este indicador llegaría a 2.5%.
Mientras que para 2023 las proyecciones pasaron de 1.5 a 1.6% y para 2024 son de 2.1%.
Al presentar el documento “Perspectivas Económicas, noviembre 2022”, el organismo internacional señaló que el consumo interno será un motor clave para recuperarse de los estragos generados por la pandemia de covid, al tiempo que resaltó que los servicios relacionados con el turismo continuarán recuperándose gradualmente, a la par que las exportaciones seguirán dinámicas; pero advirtió que la inflación y desaceleración que se espera en Estados Unidos mitigarán el desempeño económico.
Indicó que los episodios de volatilidad financiera pueden desencadenar una mayor aversión al riesgo, reducir las entradas financieras netas y aumentar los costos de financiamiento.
No obstante, por el lado positivo, la OCDE aseveró que una vinculación más rápida de los procesos de producción a México, para facilitar el acceso al mercado de Estados Unidos podría implicar exportaciones más fuertes.
De esta forma apuntó que la política monetaria debe seguir siendo estricta para anclar las expectativas de inflación, mientras que las medidas para responder a los aumentos de los precios de la energía deben dirigirse a los hogares y las pequeñas y medianas empresas.
IMCM
