Renuncia Javier Corral al PAN, tacha de 'cínicos' y 'mediocres' a sus dirigentes

Ciudad de México.- Un Partido Acción Nacional (PAN) sin respeto a sus principios y valores éticos, que en la actualidad cuenta con dirigentes “mediocres” y “cínicos”, son algunas de las causas que llevaron al exgobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, a renunciar formalmente a esta fuerza política en la que militó durante 41 años.

En una carta que difundió a través de sus redes sociales y que hizo llegar al Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Corral Jurado enumeró las razones por las cuales se deslindó del blanquiazul, y que en la misiva asegura que “los tiempos actuales demandan responsabilidad y definición”.

Para el político chihuahuense, la degradación panista tocó fondo tras aliarse con el Partido Revolucionario Institucional (PRI), coalición que dice: “no reconoce ningún pasado de dignidad”.

“Es una vergüenza infinita terminar fundidos con el PRI más corrupto de la historia; ninguna razón política, ni lealtad institucional, puede hacer compatible con la integridad personal, apoyar esa alianza que la única utilidad práctica que tendrá será reinstalar en el Congreso a varios de los personajes más cuestionados de ambos partidos. Es la alianza de las antípodas que, a quien ha desdibujado ante la sociedad, es al PAN y ha terminado asemejándose a su antiguo adversario histórico”, advierte.

Agregó que, aprovechando las “debilidades éticas de los dirigentes” partidistas, un grupo de empresarios están manipulando al PAN para impulsar desde ahí “su agenda y la defensa estricta de sus intereses económicos”.

“Por si fuera poco, se le volvió a abrir la puerta a los sectores más reaccionarios, atrasados, con posturas antiderechos, cuando la demanda natural de la sociedad es avanzar y tomar posiciones más liberales”, sostiene.

Corral Jurado destacó que en estos momentos la extrema derecha está sacando beneficio de la polarización política que vive el país “para imponer su visión y propuestas sectarias en documentos programáticos y plataformas electorales”.

"En medio de la decepción y la tristeza, al ver reducida la grandeza que durante mucho tiempo representó en la tarea civilizatoria y humanizadora de la acción política, la obra fundacional de Acción Nacional, me llevo también el grato recuerdo -como diera Borges, de los momentos vívidos con arrojo y con Gómez Morín- repito, “que la decepción no paralice, sino instigue" para seguir buscando, por otras rutas y siempre de la mano del pueblo de México, el bien común que no es la suma de intereses particulares, sino la amalgama de todos”, concluye.