Trabajadores del transporte público de la Ciudad de México, durante una conferencia de prensa, hicieron un llamado al Gobierno Federal para que puedan quedar libres del pago del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios que se cobra en los combustibles y exigieron que se autorice un incremento en la tarifa para que las 15 mil unidades de microbús que circulan en la ciudad puedan ser renovadas.
Transportistas de rutas como la 18, 36, 42, 49, 56, 98 y 119 integrados en la organización Nuevo Milenio y taxistas del sitio Taxismax que suman unos 4 mil concesionarios, consideran que quedar excentar el impuesto les permitiría operar sin ningún inconveniente.
Con respecto al aumento el la tarifa, indicaron que apenas se iniciarán las negociaciones con la Secretaría de Movilidad y que todavía no pueden dar un monto aproximado.
Explicaron que hay rutas que cuentan con problemas de financiamiento y eso afecta en la operación y el buen servicio y por lo tanto, esto puede provocar inconvenientes en el traslado de los usuarios.
Manifestaron que el Artículo 21 de la Constitución de la Ciudad de México los dejará sin concesiones, pues plantea que sólo se entregarán permisos a empresas.
