Mil partidos

El próximo miércoles, en su duelo ante el Necaxa, el América celebrará mil partidos jugados en el estadio Azteca. Se dice fácil, pero llegar al milenio como local no es un asunto menor y sobre todo, con un récord absolutamente ganador.

Esta historia inició el 31 de mayo de 1966 cuando en el juego inaugural, los cremas de aquellos años recibieron al Torino italiano y lo doblegaron al son de 2 goles por 0. Todavía se pueden ver los videos en blanco y negro que muestran al gran Arlindo pegarle de lejos y anidar en las piolas el primer gol en el Coloso de Santa Úrsula.

En esta leyenda ha pasado de todo pero quizá haya momentos que resulten icónicos e inolvidables. La primera edición de grupos llevó a la final al América y al Toluca.

Corría el año de 1970 y con goles de Carlos Reinoso y Horacio López Salgado se coronaron campeones. Otro de esos ejemplos tendría que ser aquella final de la copa interamericana jugada ante Boca Juniors.

El guardameta de los xeneizes era el legendario Hugo Gatti, apodado el loco. Se marcó un tiro libre directo en favor del América y se perfiló para cobrar el gran Carlos Reinoso. El chileno le metió el empeine y el balón hizo una curva en el aire para meterse en el primer palo del arquero. Lo impresionante fue la altura que tomó la pelota y que acabó entrando casi a ras de pasto. América se quedó con el trofeo.

En la campaña 1975-76 festejaron otro título doblegando a la Universidad de Guadalajara.

Ya con el mote de las Águilas, con una campaña brillante donde incluso acabaron como súper líderes, los americanistas enfrentaron al Guadalajara en la semifinal de campeonato. Una de las broncas más feroces jamás vista los dejó fuera de la final. Al poco tiempo, llegaría en esa misma grama la revancha y en esa ocasión, se marcó un penal a favor del chiverío. Cisneros agarró la pelota y cobró para que Héctor Miguel Zelada detuviera enloqueciendo al público asistente. América festejó el campeonato.

En el torneo Prode hicieron una remontada épica tras caer 4-1 en Tampico para meterles 4 goles y dejarlos tendidos en el terreno que ahora será parte de los festejos. Luego en el 88 le ganaron a Pumas en un juegazo de Gonzalo Farfán.

También doblaron a Cruz Azul de la mano de Antonio Carlos Santos y Carlos Hermosillo en una final de altísimo nivel técnico y emocional.

Otros trofeos llegaron a las vitrinas azulcrema como aquella final ganada al hermano menor. Necaxa, siendo dirigidos por Manolo Lapuente.

También han cantado con su porra las coronas ante Tecos y Tigres pero indudablemente la página más gloriosa fue la remontada ante La Máquina Celeste de la mano del Piojo Herrera. Feliz milenio a las Águilas en su estadio.